Por primera vez desde que llegue a este mundo no me acuerdo lo que soñe, pero mi cara estaba empapada en lagrimas y estaba angustiada, trato de no darle importancia pero veo a Shiro acostado entre mis brazos con una nota en la pata, le saque el papel que al abrirlo vi que decia "le diremos a tu madre que estas mejor de salud, cuando te despiertes anda al salon de los tronos, aca todo esta muy dificil, se fuerte, espero que te haya ido bien " la nota la firmaba Daisuke, él era el unico que hablaba sobre mi con mis padres ya que era el unico que podia mentir, agradeci en silencio, me levante de la cama, me puse un vestido corto de color blanco, bastante simple, un cinturon donde iba a ubicar mi diario y la lapicera, solte mi pelo, coloque mi lente de contacto y sali de la habitacion, esta vez me sentia otra persona, mas fuerte, y capaz de lo que sea.
Cuando llegue al gran salon estaban mis padres solos y me dirigi directamente a ellos, me arrodille adelante de los tronos y les dije -estoy de vuelta y tengo un pedido para ustedes- queria luchar y en este momento debia decirles la verdad, fue mi padre el que contesto, con un tono solemne digno del rey diciendo -¿Cual es tu pedido tan urgente? casi no te conozco Oksiris, pero algo cambio en vos en estos dias- yo respondi muy segura, tenia que transmitirles seguridad, al levantar la cabeza los ojos de mi madre transmitian preocupación y los de mi padre curiosidad, decidi hablarle a mi padre como se le habla a un rey -yo, Oksiris Emmunur, portadora de la espada del rey, regenteada por una de las estrellas tilitantes, quiero participar de la batalla que se viene como soldado, quiero conocer la academia de magia junto al jefe del ejercito y buscar nuevos reclutas, se que hay personas capacitadas, pero necesito permiso de la corona- mi padre parecia enojado y mi madre estaba muy triste, en todo el salon no se emitio un sonido hasta que dije -en realidad solo vine a avisar que voy a participar de la batalla, no voy a vivir esta guerra desde mi trono cuando todos estan luchando, si tengo el permiso de ustedes mejor, si no lo tengo, participare de todas formas, lamento si esto los molesta- mis padres estaban en silencio, parece que estan sorprendidos, yo de verdad me siento mal si no quieren que participe de la batalla, pero lo voy a hacer igual, mi deber era informarles.
Despues de un largo rato de silencio empezaron a caer lagrimas de los ojos de mi madre y en ese momento el rey reacciono diciendo -no estuviste enferma, fuiste a hacer el ritual, debo decir que nos engañaste, pero Daisuke sera exiliado por mentirnos, ya debia preocuparme de que solo una persona hablara con nosotros por tu salud- interrumpi a mi padre diciendo -no pueden exiliar a Daisuke, él estaba siguiendo ordenes, es mi consejero real, lamento decir que si queres castigar a alguien debe ser a mi, a la unica heredera al trono- la cara de mi padre decia "ganaste" y "te odio" al mismo tiempo, y yo estaba repleta de satisfaccion, pero debia calmar a mis padres, despues de todo ellos tenian el poder de poner al ejercito en mi contra, el poder contruido con años de mandato justo, yo tenia que hacer lo mismo que ellos e incluso superarlos, les hable con un tono seguro pero transmitiendo tranquilidad -majestades, papa, mama, quisiera que entiendan la situacion, pase este tiempo entrenando, juro que estoy a la altura de acompañar al ejercito, ademas la idea es recuperar mi magia, la cual puedo usar para ayudar en la batalla, no podemos prescindir de un mago con mi poder, entiendan que puedo ayudar a ganar, pero consideren que si perdemos el objetivo de los otros reinos soy yo, no va a cambiar al resultado final mi presencia en el campo, solo aportare mi magia en la pelea- mi padre parecia convencido, pero mi madre fue quien hablo muy triste y expresando su miedo -¿Y si te secuestran? Perderiamos sin terminar de pelear, no tendriamos heredero... El reino se derrumbaria- podia sentir la preocupacion de mi madre, asi que me levante, me acerque a su trono y dije mirandola a los ojos -madre, quiero que me entiendas, no estamos en condiciones de ganar si yo no peleo, mi magia es diferente, puedo prometerte que no voy a perder en el campo de batalla, si pierdo, sera en el momento que hayamos dado todo, como reino, cuando ya no pueda haber vuelta atras, cree en mi- mi madre tenia un dolor terrible en los ojos, no dijo nada, me abrazo por un largo rato en silencio y llorando.
Cuando logro terminar de llorar me dijo -¿Como encontraste la forma de escapar del reino para ir al oraculo? No saliste por la entrada principal- yo le regale una sonrisa a esa mujer tan parecida a mi y le respondi -es un secreto- ella parecia molesta y pero me respondio -esta bien, tendras permitido ir como soldado pero... La realidad es que ni el ejercito te quiere, tendras que ocultar tu identidad, iras a la batalla como si fueras exiliada, primero ganate el amor del ejercito y despues les diras quien sos, vas a mostrarles el pecado de tus ojos para que crean que sos otra persona ¿Tenemos un trato?- sonrei, era muy logico, no podia ir como Oksiris, la princesa de odio, debía ir como Kiri, la princesa del exilio y heredera del pecado, le respondi a mi madre con un simple -si- a lo que mi padre dijo -si queres ir a la academia de magia deberás ir con Lei, él te ayudara a evaluar quien esta listo para ir a la guerra y quien no- hice una reverencia hacia mis padres y dije -gracias por todo, no los voy a decepcionar, ahora ire a buscar al jefe del ejercito para que me ayude, no dije nada mas, solo empece a caminar hacia el coliseo, donde me encontraría con los demas.
Por un momento pense en Hiroki, lo vere en la ultima batalla, yo sere mas fuerte y él tambien, no veo la hora de que eso pase.
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Los Herederos Del Pecado
Fantasi"La regla principal es no mostrar miedo. Si le mostras miedo al enemigo te vera debil y con eso ya perdiste" Oksiris va aprendiendo esto entre otras cosas. Cuando lean esta historia ponganse en el lugar de nuestra hermosa protagonista. Disfrutenlo