1: "Tantas cosas inconclusas"

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Suspiré pesadamente y trate de armarme de paciencia mientras que escuchaba a mi hermana hablar. No es que no ame a Alice, si no que en verdad tenía conductas que me parecían realmente insoportables. Sin mencionar que iba conduciendo y no quería desconcentrarme, había tenido un día muy pesado, se podría decir que uno de los días más pesados de mi vida.

A pesar de que nuestros padres habían muerto, Alice no podía controlar sus reclamos.

-Querido diario... hoy me desperté con todo el entusiasmo de mi vida para un funeral, ¿y adivina qué? Sarah, mi hermosa hermana viene de un terrible humor. -leyó de su diario. -Sigo sin comprender por qué actúa tan normal después de saber que nuestros padres murieron... ¿acaso no tiene sentimientos? ¿Existe alguna esperanza para mi hermana mayor o tendré que verla hundirse en el abismo? -prosiguió con un tono dramático, era más que obvio que quería molestarme.

Solo volví a suspirar y seguí conduciendo.

-¿Quisieras dejar de leer tus cursilerías en mi auto? Es estúpido, Alice.

-¡No es estúpido! -me dio un golpe brusco en el hombro, y la fulmine con la mirada. -Los diarios sirven para guardar recuerdos importantes de tu vida, y el funeral de nuestros padres es algo importante.

-Sí, el funeral de nuestros padres es importante... no mi humor, idiota. -dije amargamente. -Y no me toques, estoy conduciendo.

-No hay más autos alrededor de nosotros. -respondió mirándome. -Aparte, estoy segura que nos perdimos... la casa de los Gilbert debe de estar por otro lugar...

-Si sé a dónde vamos, Alice.

-Creo que era por aquella calle... -ignoro mi comentario. -¡Ya te pasaste Sarah! -uso de nuevo su tono chillón. -Nos perdimos por tu culpa, ahora vamos a estar perdidas en Mystic Falls por horas... solo por no preguntarme una dirección...

Estacione el auto bruscamente, haciendo que se moviera en su asiento. Y apague el motor del auto frente a la casa de los Gilbert.

-¿Decías? -cuestione al mirarla levemente, ella abrió la boca con mucha indignación.

-¡Pude haber muerto, Sarah! -empezó con sus gritos. -¿Tienes idea del riesgo que corrió mi vida...?

Cerré la puerta del auto, dejándola sola con sus gritos.

Ya no puedo con ella... enserio.

Alice es mi hermana menor, tenía 17 años, y yo tenía 22 así que al morir mis padres yo era su única tutora legal, y no es que fuera un problema cuidar de ella, si no que a veces nos llevábamos muy mal. Era chillona, exagerada, dramática, dulce, histérica, honesta, desquiciada, amable, empalagosa, obsesiva y demasiado fan de Justin Bieber para mí. ¿Acaso Dios no pudo mandarme una hermana normal? Vivíamos peleando, por una u otra razón, simplemente no conectábamos... de niñas solíamos pelear mucho, ¿Y cuál fue la solución para mamá y papá? Mandarnos a escuelas lejos para no tener que soportarnos.

Por eso no vivíamos en Mystic Falls, que fue donde nacimos. Nos mandaron con un tutor a Denver y allí crecimos. Tuve que cuidar de Alice toda la vida, nuestro tutor legal simplemente se encargaba de administrarnos dinero y niñeras, pero cuando cumplí los dieciocho años nuestros padres habían decidido que ya no era necesario pagar por ese servicio, que yo podría encargarme de todo.

Siempre había tenido un gran conflicto con mis padres, no solo por su falta de interés en nosotras, sino porque nunca se preocuparon por arreglarme. Había tantas cosas que estaban mal en mi vida, tantas cosas que ellos habían dejado inconclusas, tantas cosas que se quedaron en el aire.

Choose Me [Damon] [Klaus]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora