Choose Me [Damon] [Klaus]

8: "Daños de fabrica"

Stefan Salvatore me había dado el rol de niñera mientras él salía a buscar alguna cura para Damon. Le hice caso porque se veía realmente preocupado por su hermano mayor y no pude decirle que no. Aparte de que si Damon iba a morir tenía que apoyarlo de alguna manera.

En realidad no sabía cómo sentirme respecto a Damon muriendo, sabía que no quería su muerte pero también sabía que no tenía tanto tiempo saliendo con él como para morirme. Una persona normal no se sentiría tan afectada.

Pero yo nunca fui una persona normal, así que no sabía cómo reaccionar.

Stefan había encerrado a Damon en un tipo de calabozo de su casa porque había intentado suicidarse frente a la ventana quitándose su anillo solar. Así que estaba en condiciones deplorables.

Después de pensarlo un rato decidí bajar a verlo.

Se veía tan enfermo. Estaba tirado en el suelo, totalmente deprimido y resignado a morir.

-¿Sigues aquí? -preguntó al notar mi presencia.

-Stefan me pidió que te cuidara. -dije. -¿Cómo te sientes?

-Así que no estás aquí por tu cuenta. -comentó al verme. -¿Sigues enojada conmigo?

-Algo. -murmuré. -Te expusiste demasiado y ahora vas a morir.

-Tenía que intentarlo.

-Lo sé. -murmuré.

-Voy a morir. -dijo. -Deberías dejarme ir.

-Yo no te estoy reteniendo. -aclare. -Stefan es él que está peleando por tu vida.

-Me refiero a tus sentimientos por ti. -no dije nada. -Estás enojada conmigo porque te involucraste demasiado, y créeme, no quiero convertirte en un daño colateral.

-Créeme, no puedo controlarlo.

Damon se quedó observándome un instante y luego respiro hondo.

-No te obligue a quedarte aquí solo porque sí, ¿sabes? -confesó. -Fue porque me gusta estar contigo. -allí toda mi lógica ya se había perdido. -Necesitaba a alguien que me apoyara.

Me gustaría decir que entendía por completo la inseguridad de Damon pero en realidad nunca fue así. Sabía que estaba allí, sabía que se sentía rechazado y que no tenía solución, pero no comprendía por qué.

Me había obligado a quedarme porque yo no lo criticaba, no le exigía mucho ni le hacía reproches. Era fácil estar conmigo, y por la situación que estaba viviendo quizás compartir algo con alguien externo le hacía bien. No me involucraba en cosas sobrenaturales, simplemente me alegraba de verlo vivo y lo escuchaba desahogarse.

Lo apoyaba y por eso me hizo quedarme.

-Creo que es mi turno de cuidarlo.

La voz de Alaric me saco de mis pensamientos y voltee a verlo. Asentí levemente y mire de nuevo a Damon, para luego encaminarme de nuevo a la parte de arriba de la casa.

No quiero a Damon muerto.

*

-¡No te muevas, Sarah! -dijo la sheriff Forbes una vez que había entrado bruscamente a la casa Salvatore. -¿Dónde está Damon Salvatore?

Vi la estaca en su mano, y adivine la situación. Ya sabían de los vampiros.

-No es un buen momento. -musite mirándola. -Damon no está bien.

La sheriff no me escuchó y paso a la parte de debajo de la casa. Elena iba entrando a la casa y estaba alarmada también. Los oficiales la detuvieron también.