¿Me amas?
Caminaste por los campos de entrenamiento, estabas confundida sobre lo que sentías.
—Maldito rubio... —Maldijiste por lo bajo mientras mordías tu dedo pulgar.
Hacia tiempo que habías empezado a sentir cosas por Anthony Leonhardt, lo viste por primera vez en el entrenamiento que tuvo con Erena, tu compañera, aún así, tus amigas, Berta y Raida te lo presentaron, aunque claro, fue realmente irrespetuoso e indiferente, pero se llevo una grata sorpresa cuando le contestaste sacando le el dedo del medio y diciendo: "te puedes ir bien a la mierda".
Soltaste un grito de frustración y seguiste tu caminata, algo irritada.
Querías dejar de pensar en él, aunque fuese un segundo.
Decidiste salir de las instalaciones por unas cuantas horas, solo para relajarte. No cogiste nada, solo te fuiste de allí, sin avisar.
Paseaste por las ciudades, hasta que decidiste ir al muro Maria, el cual había sido despejado hace ya bastante tiempo. Ibas allí desde siempre, a escondidas de tus compañeros y generales, siempre había sido tu secreto, aunque todos sabían que desaparecías en la madrugada y volvías en la mañana.
Llegaste rápidamente con la ayuda del EMT, posan dote arriba de la muralla. Te sentaste en el borde, suspirando, no había sido un buen día hoy, así que ver las estrellas podía ayudar a despejar tu mente de los pensamientos negativos que venían a tu mente.
Observaste el cielo, desde siempre las estrellas te habían fascinado, incluso, de pequeña creías que las estrellas eran bailarinas, que cantaban, bailaban y acompañaban a la luna en soledad.
Suspiraste al recordar tu inocencia e insensatez.
—¿Que estas haciendo aquí? —Pregunto una voz, tras de ti.
Volteaste para ver quien era, y para tu desgracia era cierto rubio que querías olvidar.
—Anthony —Mascullaste con odio, para luego volver tu vista al frente.
El silencio no tardó en regresar. Pero Anthony lo rompió de nuevo.
—¿Aquí es donde vienes todas las noches?
—¿Te importa realmente? —Preguntaste sarcástica mientras te volteabas a verlo.
Silencio.
—Eso creí —Volviste a voltearte.
"Si tan solo yo te importará"
Suspiraste, cerrando los ojos, pero volviste a abrirlos cuando sentiste a Anthony sentándose a tu lado. Lo miraste, atónita, pero apartaste la mirada cuando este te miró.
"¡¿Por que tienes que ser condenada mente atractivo?!"
Pensaste algo alterada por el simple hecho de estar a tu lado.
Decidiste regresar tu mirada a las estrellas, buscando algo de seguridad y fortaleza, pero te pusiste aún más nerviosa al sentir su mirada sobre ti. Decidiste tratar de hacerte la "genial" como hacías cada vez que te ponías nerviosa. Pero con Anthony, poco funcionaba, te sentías un libro abierto ante sus ojos, sus hermosos ojos.
Sacudiste tu cabeza ligeramente para alejar aquellos pensamientos de tu cabeza.
Suspiraste, no te sentías para nada cómoda en su presencia, imponente e indiferente.
—¿Quién te dijo que vine aquí? —Preguntaste para saber como te había encontrado y aflojar el ambiente.
—Nadie. Te vi salir y te seguí —Contesto mirando el cielo, ganándose un "Hmph" de tu parte.
Tu mirada se poso al frente, a kilómetros de distancia, al horizonte, donde en algunas horas, se alzaría el sol.
Tu mirada fue inmediatamente dirigida a tu mano, sobre la cual estaba la mano de Anthony. Tu cara se puso tan roja como un tomate mientras balbuceabas cosas sin sentido, lo cual hizo sonreír a Anthony.
—Maldito rubio —Mascullaste por lo bajo, apartando la mirada, obviamente avergonzada.
El silencio volvió.
"No por favor"
Maldijiste por el ambiente incomodo, para ti.
—(T/N)...—Anthony te llamo.
—¿M-mhm?—Murmuraste volteando hacia el con una sonrisa nerviosa.
—Tú...¿Me amas?
Esas palabras te dejaron helada.
—Anthony...—Murmuraste por lo bajo, y la tristeza te invadio al ver como bajaba la cabeza. Sin esperar más, colocaste tus manos en sus mejillas, haciendo que levantará la cabeza a mirarte— Por supuesto que te amo, a pesar de que me trates como cualquier otro, por más que no me mires como a Berta y Raida, por más que no te rías conmigo, te seguiré amando. Por que mi amor...es ciego.
—(T/N)...—Murmuro sorprendido. Bajaste la mirada, esperando un rechazo inminente—Eres la chica más dulce y hermosa que he visto. No me arrepiento de haberme enamorado de ti.
Con total asombro, lo miraste a los ojos. En sus ojos se veía que no mentía. Y en sus labios se mostraba una sonrisa.
No pudiste oprimir la sonrisa enorme que se asomo por tus labios.
Te tiraste sobre el, riendo.
Cuando te apartaste a mirar lo, Anthony inmediatamente capturo tus labios en un dulce beso, el cual correspondiste mientras colocabas tus manos en sus hombros, mientras que una de sus manos se encontraba en tu mejilla y la otra en tu cintura.
Al separarse se miraron a los ojos y rieron, rebosando de felicidad.
Volteaste hacia el horizonte, el sol estaba saliendo, eso hacia el momento aún más romántico. Te acurrucaste en el pecho de Anthony, mientras este acariciaba tu cabello, con su mirada fija en el horizonte con una sonrisa.
—Anthony —Llamaste suavemente.
—¿Si?
—Te amo
—Yo también te amo, (T/N)
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One-shots ♥
RandomHola, mis amores, mis soles, mis corazones! Aquí les dejare unos one-shots que se me han ocurrido hacer, serán de distintos temas y habrá cambios en los personajes, aún así, espero que sea de su agrado.