One-shots ♥

Hombre! Mikasa x Lectora

Quédate junto a mi.

Te dedicaste a observarlos hablar desde tu mesa. 

La morena y la rubia reían, mientras que el azabache se encontraba igual que siempre, callado y serio. Con su vista fija en ella.

Erena Jaeger.

La supuesta "hermana" del azabache. Aunque claramente el era adoptado, pues tenía rasgos asiáticos que lo diferenciaban de la morena, aún así, no podías evitar odiarla.

Suspiraste en frustración y te levantaste, para luego retirarte de la habitación.

Te dirigiste al bosque, el cual estaba a unos kilómetros de las instalaciones, a pie, el bosque era el lugar al cual ibas a relajarte.

Y a llorar.

Buscaste con la mirada a tu querido árbol Trevor. Así es, nombraste al árbol Trevor a raíz de un sueño que tuviste cuando caíste dormida en sus raíces, recordabas ese día como si fuera ayer.

El día desde que te hiciste parte de ese árbol.

Y lo nombraste, Trevor.

Flashback

Corriste y corriste sin mirar atrás. Siempre era lo mismo, siempre eras la débil, sin importar que, incluso Mikasa te lo había dicho en cara, eso fue lo que más te dolió.

Debido a que no miraste por donde corrías, tropezaste con las raíces de un árbol, lastimando tus brazos al tratar de amortiguar tu caída.

Comenzaste a sollozar una vez te sentaste bajo el mismo árbol que había causado tu caída debido a sus raíces.

Las lágrimas comenzaron a caer libremente por tu rostro, siguiendo de jadeos y algunas quejas. Hasta que sin darte cuenta, caíste dormida.

Las imágenes comenzaron a reproducirse en tu mente. Un sueño.

—Vamos amor, seamos libres, juntos.

¿Mikasa?

—Podremos ver el mar, podremos tener una vida normal, podremos tener una familia. Ya no tenemos que preocuparnos.

¿Y los titanes? ¿Que pasó?

—Vas a ser una excelente madre.

Despierta.

End Flashback

Suspiraste y acercaste tus piernas a tu pecho, abrazándote. Si no te amabas, ¿Quién los haría?

—Bueno, al menos te tengo, ¿No es cierto, Trevor? —Preguntaste al árbol, aún sabiendo que no iba a contestar. 

Miraste el cielo, estaba anocheciendo.

Pero no querías regresar, ¿Para que? ¿Para que todos te ignoraran? ¿Para que nadie te notará? ¿Para sufrir más de lo que ya has sufrido? Preferirías morir antes de vivir en soledad o en cualquier caso, abandonar aquello que te hacía mal.

Tal vez sería bueno no regresar jamás.

Nunca sabrían donde fuiste.

Por que Huiste.

Donde te escondiste.

Solo podías irte y ya.

—Libertad —Susurraste cuando aquellas ideas pasaban por tu cabeza.