One-shots ♥

Hombre! Hanji x Lectora

Enamorada de un loco

Caminaste por los pasillos de la instalación, con tu mirada fija en los papeles que llevabas en manos.

Ni siquiera estabas interesada en ellos, pero querías quitarte de encima el aburrimiento.

Te detuviste frente a una puerta, exactamente, frente a la oficina de Levira, tu comandante. Suspiraste, algo nerviosa por su actual personalidad y comportamiento, además de que su aura no es nada agradable.

Con decisión, tocaste la puerta y pudiste escuchar un "pase" por parte de la pelinegra.

Empujaste la puerta y te quedaste en silencio al ver a tu capitana con su expresión seria habitual y a un hombre castaño sentado en el escritorio, quién te miraba con ¿asombro?. De inmediato recordaste los papeles y volviste en si.

—¡Heichou! La señorita Erwina me ha pedido entregarle estos papeles —Expresaste firme, sin moverte de donde estabas.

Sin pensar, te acercaste a ella y le tendiste los papeles sin miedo alguno, mientras que el castaño no paraba de observar te.

Pudiste observar como la azabache suspiraba, rendida.

—Cadete (T/A), este es mi compañero, Hanji —Dijo la azabache, haciendo referencia al castaño.

—Es un placer —Dijiste seriamente mientras le tendías la mano, ocultando tu timidez.

—El placer es mio —Respondió el castaño estrechando tu mano para luego besar el dorso de tu mano, suavemente, haciendo que hirvieras cual tetera, de la vergüenza.

—Tsk. Cadete, puede retirarse —Comento la azabache con algo de fastidio debido a su compañero.

—¡Si! —Hiciste el saludo y te retiraste rápidamente de allí.

Caminaste con el corazón palpitando de forma acelerada y con una sonrisa boba en la cara.

—Debo admitirlo...Era atractivo.

ALGUNOS DÍAS DESPUÉS

Caminaste a un lado de tu amigo, casi hermano, Eren. Se reían de chistes que hacían de improvisto, mayormente relacionados con su compañero, Jean, pero tu no lo hacías con mala intención, solo querías pasar un momento de diversión.

—Jaeger —Expreso una voz fría frente a ustedes.

Cuando miraron hacia al frente, se pusieron rígidos y pálidos al ver a Levira cruzada de brazos y con una expresión de molestia terrorífica, disimuladamente, ambos pegaron sus cuerpos debido al miedo que la azabache les producía, su aura era amenazante.

—¿S-si, Heichou? —Preguntaste, intentando sonar calmada.

—Dije, Jeager, no (T/A)

En tan solo segundos las lágrimas se acumularon en tus ojos, debido al terror que te dio su comentario y su mirada, haciendo te temblar a ti, y también a Eren.

—¿Q-que necesita, Heichou? —Pregunto nerviosamente el muchacho.

—Hanji te necesita en su laboratorio. Ahora —Aquello sonó más una amenaza que un simple aviso.

En tan solo segundos, tu acompañado te había dejado sola.

¡Eren! ¡¿Como te atreves a dejar me sola?!