Una Astoria Diferente| Dramione

7: Una carta |MARATÓN

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7: Una carta

Al siguiente día era el gran juego de quidditch de Slytherin vs. Hupplepuff.

No esperé a qué Daphne me obligará a ir, sino que, siendo la primera en llegar me ubique en las gradas más altas y me senté a esperar.

Los alumnos de ambas casas que participaban iban completando el lugar, se podía notar cierto clima de competitividad, aunque no se comparaba con la que solía estar presente en los juegos de los leones y serpientes, según recordaba.

Cuando el juego ya tenía sus minutos de tiempo recorrido, decidí escaparme, no quería estar ahi, rodeada por serpientes, quería alejarme e ir al castillo a buscar un respiro y tranquilidad.

En cuanto llegué allí, pocos alumnos caminaban por los pasillos de Hogwarts, pero lo que me sorprendió ver fue a Ronald con Ginny caminando en sentido contrario hacia el que yo me dirigía.

En lo que iba de la semana no los había encontrado directamente y sentí algo reconfortante en mi, así como el extraño deseó de ir corriendo hacia ambos, pero en vez de eso, recordé quien era, mi uniforme y el  trato que tenía, y me corrí a un lado y los vi pasar mientras escuche lo que iban hablando.

— ¿De verdad les escribió? —la voz de Ginny pronunció

— Qué sí, a Harry y a mi, las cartas nos llegaron esta mañana, donde decia que ella estaba bien —explicó Ron

¿Ella?

— Me alegra tanto saber que enviará una carta ya había sido mucho tiempo sin escribir y no es algo típico de Hermione...

— No, no no es posible —negué sin notarlo, ambos pelirrojos dieron media vuelta en mi dirección y me observaron extrañados. Tuve que disimular de imprevisto. — ¿Qué? Me refiero al juego, Hufflepuff va un punto más aunque...¿Por qué les estoy explicando esto a ustedes? Sigan con su conversación o lo que hacían —fingi molestia

Vi a Ginny reír, y junto a Ron  darse vuelta para seguir su camino, mientras escuchaba una última frase ser pronunciada con resignación.

— Estas serpientes siguen siendo las mismas de siempre, ni la guerra los ha cambiado

...

Me dirigí de forma apresurada  a la sala común en cuanto salí del Castillo. Quería explicaciones de lo que había escuchado, porque sí estaba muy segura de lo que había oído.

Y sí Harry Potter y Ron Weasley, habían recibido una carta de Hermione Granger, de mí persona. Siendo así, lo que me preocupaba era que  yo no les había escrito nada.

Así que sabiendo en que no podía preguntarles por ello por nada, recurri directamente a quién creía que era responsable o al menos sabría darme una explicación de lo que me tenía afligida.

Busqué un pergamino entre mis pertenencias y una pluma para escribir lo siguiente:

Grecia Storner:
                            Me siento confundida, he oído algo sobre una carta que no he enviado y ha sido enviada a dos amigos
   Necesito explicaciones. Así como saber si hay novedades sobre ese tema que me involucra.
Por aquí todo marcha bien, las clases son sencillas, mi hermana es de ayuda en ocasiones.
   Espero obtener pronto las respuestas.

Se despide,
A.G.

                                                 

                                                                   

Cuando termine, con el pulso tembloroso, abrí la jaula de la lechuza perteneciente a Daphne y le entregue la carta, viéndola salir por la ventana del cuarto.

En el trato que había tenido con la familia Greengass quedaba una condición más que clara: «La discreción».

Eso implicaba no escribir cartas que pudieran levantar sospechas, porque uno nunca sabe que podía pasar con una carta o a manos de quien podían llegar estás.
Así que el contenido debía ser disimulado, para que quien lo leyera no entendiera de lo que se hablaba, pero entre los remitentes si se comprendiera lo escrito.

Astoria insistió en que si necesitaba escribirle, lo haga con un nombre clave, y de ahí salía el Grecia Storner, nombre inventado por ella. Lo utilizariamos cuando nos quisiéramos comunicar y sus padres no debieran enterarse.

Me pareció buena idea, después de todo, si incluso la misma Astoria tenía dudas sobre el trato, debía ser porque ella no estaba tan involucrada como creía.

De verdad sentía que no debía husmear en asunto familiares de la familia. Pero me involucraban. Y sí alguno de ellos había escrito una carta en mi nombre, estaban rompiendo con el trato. Y eso no me agradaba para nada.

Ahora esperaría la respuesta, y deseaba por una parte que haya sido Astoria, porque desconocía quién otra persona pudiera hacer eso.
De todas formas quería saber motivos, y pronto.

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N/A tenía este capítulo y el anterior escritos desde el viernes, pero no quería actualizar solo teniendo dos.

Y dado a que el día sábado estuve todo el día ocupada con las ventas que tenía que hacer con mis compañeros. Dediqué mi Domingo a editar y a publicar :D

¡Quedan 2 capítulos más, con sorpresa!

Nos leemos.