I Won't Lie To You (Yo nunca te mentiría)

Cap.16: "La fiesta"

Ayer, tras mi baño extasiante me di cuenta del sueño que tenía y me acosté en mi cama queen size  tras ponerme un pijama. Lo que consistía en una camiseta de tirantes lisa de color negro junto con unos pantaloncillos estampados de flores enormes que no me diesen demasiada calor para dormir. Soy bastante práctica, ciertamente.
Cuando me tiré sobre la cama, estaba agotada, ni siquiera bebí o comí algo antes de acostarme. No preparé nada para al día siguiente ya que era viernes y el domingo me daría tiempo de sobra para meter los libros que me harían falta en la mochila y la ropa que usaría ese día, por lo cual, caí rendida en los brazos de Morfeo.

Al día siguiente, es decir, hoy y ahora mismo, me levanto de la cama con pereza, voy al baño medio adormilada y una vez termino allí, bajo las escaleras hasta el primer piso para desayunar lo que encuentre por ahí. Creía que la cocina estaría repleta de gente pero en realidad todo está demasiado tranquilo para ser sábado. Para mi sorpresa, hay una pequeña notita rosa palo pegada en la nevera que reza:

Cariño, tu padre, tu hermano y yo hemos salido a hacer unos recados. Te hemos dejado durmiendo porque Cody nos avisó que necesitabas descansar, ya que habías tenido un día duro. Si te apetecen unas tortitas con miel que ha preparado papá antes, puedes encontrarlas metidas en el microondas para que se mantuvieran calentitas para ti.

Pd: No regresaremos hasta la hora de comer. Por cierto, Melanie te ha llamado antes; dice que necesita hablar contigo y que cuando veas esto, la llames.
Un beso,
                            Mamá.

Arrugo la nota y la tiro a la basura con una pequeña sonrisa. Tras desayunar las tortitas que había preparado papá con tanto cariño, subo los escalones de nuevo hacia mi habitación para telefonear a Melanie. No se me ocurre que pueda querer, pero cuando me doy cuenta estoy marcando su número de teléfono, ya que en la pantalla aparece:

Llamando a Mejaa...

Tras unos segundos comunicando, la voz femenina de mi amiga se escucha al otro lado de la línea y me saluda mientras yo sujeto el móvil contra el hombro y la oreja incómodamente. Al final me rindo de parecer idiota y decido poner el manos libres para poder hacerme un moño.

-Hola, Zorra. ¿Cómo estás? Te he llamado ayer y hoy por la mañana temprano, sobre las nueve o así. No me contestaste por lo que supuse que estabas durmiendo.

- Sí. Supones bien, estaba reventada con todo lo que pasó ayer... -suelto una pequeña risita.

Me visto  con un conjunto cómodo de jeans azules y una blusa crema junto con unas Vans del mismo color que la blusa. Mientras mi mejor amiga me habla por la línea, me peino con los dedos los mechones que han quedado sueltos consiguiendo un moño desenfadado mucho más elegante de lo que estaba y me decido entre ponerme un suéter para estar más calentita. Todavía estamos en invierno a fin de cuentas, ¿no?

-Bueno, ¿qué tal te encuentras por lo de ayer, chuli? Creo que fue un día difícil para todos y bueno, he de confesarte que tu hermano lo sabe con pelos y señales. Se lo sonsacó a Luke cuando lo vio de esa forma. El no quiso decir nada pero Michael cantó como un pajarito. Sabes como es de pesado.

Nos reímos. Ahora entiendo por que Cody les dijo a papá y a mamá que necesitaba dormir bien. Seguramente luego quiera hablar conmigo más a fondo; digamos que no le conté todos los detalles con pelos y señales... Mic es un huevón aunque lo quiero mucho.

-Pues... Estoy bastante bien, creo que la tremenda siesta que me he echado a servido para ordenar conceptos dentro de mi cabeza. Y he llegado a la conclusión de que Nate es un idiota... Pero, va, ¿solo llamabas para eso...?