Lady analizó sus posibilidades de supervivencia. Definitivamente estas no estaban a su favor.
Estaba en un sitio desconocido y no aparentaba ser amigable. El viento soplaba en frío y el sonido parecía ser ahora sólo un mito. Ella abrió la boca y meció sus labios, pero nada salió de ellos.
El Shadow salió de la misma ventana que ella y la atacó. Lady pasó un rato considerable batallando contra ese enemigo sin embargo pudo vencer, esta vez no tan ilesa como debería siendo que éste antes de morir explotando, se aseguró de cortar su brazo izquierdo con su cuchilla.
Lady hizo caso omiso de la herida (nada grave) y entró de nuevo a la ventana encontrándose con una réplica casi exacta de la mansión del señor Watanabe, pero aparentemente ahora todas las cosas estaban al revés. Además de que el ambiente estaba teñido de rojo.
Había libros viejos en las estanterías con pastas oscuras y gruesas, podridas con olor a brea. Candelabros antiguos en vez de las lámparas de araña en el techo y pinturas con gente que ella no había visto nunca en su vida. Mujeres elegantes y hermosas, hombres imponentes y soberbios.
«Debo ir con cuidado» se recordó «oficialmente estoy en terreno enemigo».
Razonó que quizás de algún modo ese mundo infernal y el humano tenían como conexión la mansión del magnate. Un portal para los demonios como los fantasmas y el Shadow de hace un rato. Un punto estratégico como otras zonas adentro del mundo que Sparda no selló debido a que, la mayor de dichas puertas y la más peligrosa, le costó horrores poder bloquearla. Casi su vida.
Lady, Dante y Trish ya habían deducido que esto de las puertas pequeñas que ocasionalmente atravesaban seres demoniacos iba a traer constantes dolores en el trasero. Ellos jamás habían podido atravesar ninguna de esas puertas pero claramente había seres que sí podían ir a través de ellas como si se hablase de una cortina, cosa que aumentaba las ganancias de DNC.
Hasta donde sabían, la Isla Mallet y Temen-Ni-Gru eran los candidatos perfectos para que los peces gordos pudiesen atravesar sin problemas dichas dimensiones, lo que hacía de esto un gran y problemático descubrimiento que no debía permanecer existiendo.
»Si de algún modo llegan a encontrar el modo de engrandecer una de las "puertas pequeñas" para cruzar al mundo humano, entonces que Dios tenga piedad de todos los mortales —había dicho Trish en una ocasión. Por eso mismo Lady se hallaba atendiendo este tipo de emergencias.
Sus instintos nunca le fallaban.
Durante su largo trayecto Lady se enfrentó a diversos tipos de demonios, unos más fuertes que otros, numerosos y molestos que no tardaron en morder el polvo. Al poco tiempo ella se dio cuenta de que el sonido de las balas y los gruñidos de los demonios sí tenían libertad a diferencia de su propia voz, eso la extrañó demasiado pero al final lo atribuyó a su condición humana.
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Purificando Demonios | 🔞
Dragoste『Vergil x Lady/Mary』"Ten cuidado, Mary. Los demonios son embusteros y traicioneros. Harán lo que sea por matarte, incluso intentarán hacerte amarlos. Pero no caigas en su trampa o lo pagarás con sangre". Sabiendo todo eso bien, Lady se pregunta: ¿Có...