"Momentos"

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Es curioso cómo una persona puede llegar sin avisar y volverse especial,
En mi mente no estaba planeado encontrar a Diane,ella lo hacía ver todo más sencillo,
Usualmente yo me la pasaba quejándome de cada cosa en el mundo.

El sujeto que nos atendió un martes después de el colegio en la tienda de helados me había dado un sabor equivocado,
Ella lo veía como una oportunidad de probar un sabor distinto.

Un jueves fuimos a ver una película al cine y una pareja frente a nosotros discutían,
Ella escuchaba una interesante historia sobre cómo el chico llamado derek había salido con la amiga de Denis. (La chica que discutía en el cine)

El tiempo se nos pasaba tan rápido juntos,
Cada vez conocía más a Diane,
Le gustaban los gatos,
Su color favorito era el azul aunque no lo usaba mucho,
Cantaba al ducharse y de niña creía que al morir uno simplemente se convertía en una nube más en el cielo.

Poco a poco la ayude a tachar más cosas de su lista de cosas por hacer,

-Ir a un juego de beisbol.
-ver el amanecer en el tejado.
-cantar una canción en un lugar público.
-Leerle cuentos a niños en un hospital
-correr dentro de una biblioteca, esta fue un poco interesante por el echo de que el guardia de la biblioteca nos saco de ahí.

Todo era tan fácil si Diane estaba conmigo.

¿Recuerdan cuando les dije que hubo un momento de mi vida en el que nada me importaba y me sentía feliz? Este era ese momento, a lado de Diane.

Todos en este mundo tenemos un lugar favorito,
Para algunos es un parque donde conocieron a el amor de su vida, para otros el lugar donde supieron que serían padres.
¿Para mí? Ella, ella era mi lugar favorito.
Era el lugar donde quería estar siempre.

Hubo noches en las que solamente nos juntábamos para escuchar los sueños de el otro, nuestros miedos y secretos.

Recuerdo mañanas,tardes y noches conversando con Diane sobre todo y nada,
Cuando ella se sentía al borde de la depresión me buscaba y yo le recordaba nuestra promesa, le recordaba las cosas que quería hacer y los sueños que tenía.

Cuando yo sentía un vacío en mi pecho y quería hundirme ella me daba motivos para seguir, era mi apoyo.
Ella cambiaba mi manera de ver las cosas, me hacía pensar y recapacitar, me daba motivos. Era mi motivo.

Ambos confiábamos en el echo de que sea cual fuera la situación,la hora y el momento, estaríamos el uno para el otro.
Éramos piezas perfectamente compatibles para el soporte de el otro.

Hasta en mis peores días intentaba que los suyos fueran los más bellos.
Hasta cuando sentía que mi vida no tenía sentido intentaba darle uno grande a la suya.
Hasta cuando cuando despertaba y solo deseaba morir de una vez por todas intentaba que ella estuviera llena de felicidad y con interminables ganas de vivir.
Muchas veces mire la soga y dije que no me iría, quería asegurar que ella estaría bien.
Fue mi aliento, mis motivos.

¿Recuerdan que dije que la vida son momentos? Pues no todos los momentos son agradables,y lo agradables no son eternos.

Se acercaban lágrimas, me hubiera gustado estar listo para momentos así, pero no lo estaba,
En ese momento al verla sonreír jugando con su helado, su rostro al escuchar la discusión en el cine, su voz mientras cantábamos en aquella plaza o sus ojos mientras leíamos aquellos cuentos a los niños.
En todos esos momentos no tenía idea de cómo sería perderla.

Me hubiera gustado que el mundo se detuviera ahí, en uno de nuestros momentos, tal vez de esa forma aún estarías aquí.
Viviendo eternamente en nuestro momento.

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