Harry.

Track 1

Harry se quedó atontado mirando a su celular, el último mensaje que había recibido.

«Lo que quieras, estoy cansado de ti, aprende a vivir sin mi»

Había tenido planeado ir al cine esa tarde, pero un día antes recibió un par de tareas descomunales, una en especial en equipo. No podían aplazarlo porque los siguientes días los chicos no podrían juntarse, entonces Harry había mandado un mensaje para cancelar su cita y eso era lo que había recibido después de molestar a su pareja con media hora de disculpas.

Mordió su labio inferior para contrarrestar el ardor en sus ojos y evitar las ganas de llorar. Parpadeo repetidas veces antes de mandar un «Entendido, no te molesto más.», guardó el móvil en su bolsillo y se acercó para llamar a la puerta.

Liam le recibió con esa preciosa sonrisa amigable y sus bonitos ojos de cachorro mimado, le encaminó hacia la sala donde sus otros dos amigos estaban. Niall le saludo llamándole a sentarse a su lado mientras que Louis ya estaba buscando algo en el ordenador, él siempre quería acabar lo más rápido para no hacer nada después.

Se sentó sobre el taburete a lado de Niall cuando sintió su celular vibrar, pero se contuvo de mirar un nuevo mensaje, no quería que Liam y Niall le dijeran sobre tener que esconder su teléfono para que no estuviera de meloso con Nicholas, aunque ya no era así.

Sin embargo, cuando Liam fue a llamar por una pizza y Niall fue por las cervezas, saco el móvil bajo la mesa mientras Louis seguía tecleando.

«No sé por qué le das tantas vueltas a esto, hay que terminarlo antes de que sea peor.»

Harry se quedó perdido a la mitad de las palabras. ¿Terminarlo?, ¿esto?, pero si ayer le dijo cuanto le amaba y Nicholas había empezado un plan de reconquista, por eso había sido la idea de la cita.

No pudo contener las lágrimas porque esta vez cuando parpadeo una lágrima caliente escapó de su ojo de una manera abundante que le hizo casi desmayar, limpio disimuladamente sus ojos antes de responderle «Espera a que llegue a casa, por favor, no tomes ideas precipitadas, podemos arreglarlo. Solo espera que llegue.»

Harry sabía que pedir eso era inútil, una vez que algo se metía en la cabeza del otro, no salía hasta que la realizaba. Esto era el fin de su verdadero amor.

Levantó la vista al no escuchar ningún ruido y Louis lo miraba con el ceño fruncido, se sonrojo violentamente sintiendo sus mejillas en llamas y parpadeo para que cualquier rastro de lágrimas se fuera, escucho a los chicos volver y deslizó su celular a su bolsillo.

— Seguro Louis ya está contándote sus depravaciones — se escuchó la voz de Niall, al mismo tiempo que señalaba sus mejillas rojas y después todos reían.