Track 4

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Miró a través del gentío para después encontrarse con los chicos. Niall apartaba su celular de su oído y Liam ya estaba palmeando a un lado de sí para llamarlo a sentarse. Louis estaba con toda su atención en su móvil.

— ¿Llevas tu teléfono? —el rubio de Niall le preguntó apenas se sentó.

— No, está en casa, no tiene caso.

El chasqueo molesto de los labios de Louis logró escucharse en la mesa, antes de un impacto que seguramente era de Niall o Liam para que este cuidara su boca y no fuera un maldito, a pesar de que Harry era el maldito por no poder parar de hablar de su ex en cada conversación a pesar de tener tres meses separado de él.

— No puedes ser feliz sino tratas de enfocarte en ti —dijo Louis, cansado.

Nadie dijo nada, la pizza llego unos minutos después, cortando la tensión que se había creado. Ya nadie decía nada a Harry además de que no era su culpa, ahora solo se limitaban a escucharle. Harry siempre durante las últimas salidas terminaba llorando y con el ceño fruncido de Louis como regalo para él, justo como en ese momento.

Harry se sentía culpable de cierta manera, porque arruinaba ahora no sólo su vida amorosa, sino la convivencia con sus amigos, él era un desastre.

Su mirada estaba fija en él para cuando volvió su vista a la mesa, no se había movido aun por ningún trozo de pizza como lo habían hecho Niall y Liam que comían con entusiasmo mientras trataban de sacar una plática a flote. Sin embargo, lo hizo después de que Harry decidiera comer.

Su ceño no se suavizó.

Harry.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora