Harry.

Track 9

El invierno estaba llegando lentamente, esta vez solo había optado por una camiseta de manga larga, no como Louis que llevaba una de mangas cortas que cubría con ayuda de su chaqueta de mezclilla.

Tenían unos veinte minutos caminando a donde fuera que Louis los guiara, iban a cenar en casa de uno de los amigos de Louis.

— ¿Entonces Liam y Niall no pudieron venir? —Harry preguntó mientras lo miraba encender su cigarrillo dentro de la chaqueta.

— ¿Uh?

— Que si Niall y Liam no pudieron venir esta vez tampoco.

Louis le miro por unos segundos antes de tomar una calada, su mano libre se fue a un bolsillo delantero de su pantalón y Harry se encontró frunciendo el ceño ante eso.

— Creo que está claro que yo estuve mintiendo sobre eso, solo para salir contigo —se encogió de hombros luciendo despreocupado, aunque no volvió acercar el cigarro a sus labios.

El sonrojo se sintió violento en las mejillas de Harry que sentía ardiendo, posiblemente podrían explotar con cualquier toque incluso del viento.

— Yo pensé que no te agradaba. —las palabras salieron firmes pero se sentían inseguras en su boca.

Louis suavizó los músculos de sus hombros y volteo hacia él, sin interrumpir el camino que llevaban. — ¿Por qué?

— Siempre hacías una mueca al verme — Louis frunció el ceño y Harry río señalándole— ¡Justo como eso!

— Bueno. —bufó Louis mientras el otro se preparaba para la ola de honestidad— Ignorando el hecho de que recordaste a tus amigos solo cuando los necesitaste, te la pasabas llorando en todos los rincones por un imbécil.

Sonrojado, Harry golpeó su hombro.— ¡No me la pasaba llorando en los rincones!

— Es verdad, —asintió con una sonrisa— llorabas en todos lados.

Louis le atrapó en un abrazo acercándole a su pecho, cuando estuvo a punto de tropezar con una piedra, se acomodó en el hueco que formaba la curvatura del cuello de Louis aspirando su aroma, un toque de tabaco del cual ambos se habían olvidado, junto al fuerte aroma de su exquisito perfume, suspiro en su ensoñación antes de ser interrumpido por una voz varonil que hablo más alto de lo normal.

— Dejen de llorar, Tommo y su novio ya llegaron.

Sintió la vibración del pecho de Louis al reír contra el suyo.