25. Lee Hae Ri.

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"Sé que no te merezco pero yo todavía quiero hacerte feliz siempre".

—One day.

Otro día agotador más en la oficina, y todo lo que me quedaba por delante. Ojalá tener un respiro y salir por ahí de una vez pero ya sólo quedaba un mes para el comeback de Infinite y estábamos terminando de ultimar los detalles. Ellos grabarían pronto el videoclip y yo necesitaba tenerles listo el vestuario para ese día. Estábamos hasta arriba de trabajo, ya no sabía ni a quién encargarle las cosas para que se fuera acelerando el trabajo. Esa noche me tocaría quedarme hasta las tantas de la madrugada terminando de arreglarles el vestuario a los chicos.

Qué agobio.

Cómo me gustaría que empezaran ya de una vez con las promociones y así despreocuparme de ellos un poco. Al ser estilista todo el trabajo recaía en mí, todo lo que ellos vistieran tendría el nombre grabado de Lee Haeri, y no podía permitirme algo mediocre porque me había costado mucho ganarme un nombre en este mundo en el que sólo conocen los estilos de Balenciaga y Gucci. Pues los modelos que mis chicos llevaban no se centraban en ellos, era algo mas personal que eso. Bueno, el maquillaje y el peinado ya era made in la estilista, así que no tenía mucho más que decir. Los estilistas amenudo somos criticados por no tener ideas propias y eso es algo que me saca de quicio. Saber elegir un buen vestuario a juego con el maquillaje y el peinado, ¿no es tener una idea propia? Panda de ignorantes.

Llamaron a la puerta y di paso dejando los papeles que tenía en la mano a un lado. Dongwoo me sonrió y cerró la puerta antes de sentarse frente a mí. Últimamente lo compartía todo con él porque, literalmente, me había quedado sola. Había estado enfadada con Hoya y también con Soonyun, quitándoles a ellos, Naeyoon estaba en Japón y Minseok no se separaba de mi mejor amiga así que... sí, mi único y gran apoyo incondicional había sido Jang Dongwoo.

— ¿Cómo está mi estilista favorita en el día de hoy?

— Hasta el culo de todo.

Él rió y me hizo esbozar a mí también una sonrisa.

— Hoy me toca quedarme a trabajar de madrugada, ¿sabes?

— Oh, me da que ya somos dos.

Volvieron a llamar a la puerta e indiqué que podía pasar. Hoya y Myungsoo entraron. Mi mejor amigo y Dongwoo se miraron fijamente y luego cada uno siguió a lo suyo.

— Lo siento, venía a que me tomes tú de nuevo las medidas porque la modista no llegó todavía —dijo Myungsoo.

Yo me levanté de inmediato y le hice un gesto para que se pusiera en el otro lado. Dongwoo se levantó también.

— Hae, ¿te apetece ir a cenar? Ya que vamos a estar tan ocupados esta noche por lo menos coger energías.

Yo dudé por un momento si aceptar su oferta o no, tenía demasiadas cosas que hacer y quizás pedir comida a domicilio no era una mala idea.

— Además, tengo que hablar de una cosa contigo y sería la ocasión perfecta —insistió.

Myungsoo miró a Hoya y yo miré a los dos, extrañada.

— ¿A mí? —Dongwoo asintió —. Oh, vale.

— ¡Genial! Pásate por el aula de ensayo hacia la noche.

Sin darle más importancia al tema, fui directa a por una cinta métrica para tomarle las medidas a Myungsoo. Hoya, todavía sin decir nada, se sentó en mi silla y empezó a cotillear todo el trabajo que tenía que hacer.

14 días [Sunggyu Fanfic].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora