Narra Sairus
Besar sus labios fue lo mejor del mundo, son tan dulces y suaves, por eso todo tiene que estar Perfecto, todo debe salir según lo planeado, sin ningún sobresalto, y me encargaré de que sea así.— CHRIS-grito el chico llamando a su sirviente.
— S-si señor- Christofer era un adulto no más de 30 años, era alto, flaco, muy amable y cortes y sobre todo servicial y paciente ya que teniendo a Sairus como amo la vida podría ser un poco difícil.
— las flores azules ya las trajeron todas.
— sí señor, todas en perfecto estado y ya están ubicadas- dijo con una lista en la mano.
— las mesas y sillas con sus listones azules y mantel blanco, la alfombra azul, el pastel de vainilla grande, con chispas de chocolate, las serpentinas azules, morada y plateadas, en ese orden, y......- Simon lo interrumpió.
— sí, sí, sí y sí, señor todo está Perfecto- el hombre lo miro preocupado- señor hay alguna razón por la cual este tan alterado por un simple baile.
— no estoy alterado, porque lo preguntas- dijo en chico.
— porque otra vez tiene ese tic raro en el ojo y no ha dejado de morderse las uñas.
— me conoces bien no Simón- dije arreglándome mi traje y mirándolo serio- se trata de una chica.
—JAJAAJAJ- lo mire extrañado y molesto- discúlpeme señor- dijo también arreglándose el traje- es que usted con problemas con las mujeres se me hace muy difícil de creer.
— es que ella- suspiré- es diferente, no es como las otras chicas, que se lanzan a mi sin yo tener que mover ni un músculo, se trata de Tezz.
— Tezz Danvers, la mejor amiga de su hermana, vaya este difícil señor, y que piensa hacer.
— si se trata de ella, no lo sé, ella no sucumbe a mis encantos, y hace como si yo no existirá.
— señor y porque no la invita personalmente al baile y después la invita a bailar y así la luna hará el resto.
— ES CIERTO LA LUNA, porque no pensé en eso- tome un libro viejo de mi estantería- es verdad, cada mil años, una noche cuando la luna esté llena, una pareja será bañada con sus luz deslumbrante uniendo a estas dos almas para siempre- cerré el libro creando un sonido sordo- si baila conmigo, la luna nos bañará con su luz, Y ESTARÁ CONMIGO, SI, PORQUE UN ECHIZO DE ALIANZA NO SE PUEDE ROMPER TAN FÁCIL SIIII- dije casi gritando de lo emocionado que estaba.
— señor y si la luna no los elige.
— pues entonces yo....- deje de hablar esto todavía no lo pude saber nadie- y-yo la enamoraría de la forma antigua, tardaría más pero al final cumplirá mi objetivo que es hacerla mía.
— señor le deseó suerte, ahora me voy a terminar de preparar todo.
— está bien- espere a que se fuera y cerrara la puerta y ya no escuchara sus pasos en el pasillo, para correr a mi vestidor y abrir un pequeño closet que sol labre con una llave- ooooh mi quería Tezz serás mía quieras o no- dije acariciando una de las miles de fotos que tenía de mi hermosa chica, todo de ella me encantaban, su voz, su suave cara, sus enormes ojos miel, su tersa y sube piel, TODO de ella me volvía loco y aria lo que fuera para ella sea mía.
Narra Tezz
Aún no sé cómo llegue a esta situación, tenía un libro me la cabeza y mientras usaba tacones, mi hermano me dijo que caminara a lo largo de su habitación mientras su novio y el me observaban, cada paso que daba era un tropiezo, ya me dolían los pies, yo no aguanto más esta situación.
— ALTO- grite haciendo que mi hermano y su novio se sobresaltaran.
— qué pasa, estás loca- hablo mi hermano.
— cállate Taylor, no quiero esto, no pienso usar tacones- dije mientras lanzaba los tacones contra una pared- no pienso corregir mi forma de caminar- lance el libro al suelo- Y NO QUIERO IR A ESE TONTO BAILE- salí corriendo a mi habitación azotando la puerta, me lanzo en mi cama y tome mi teléfono, y puse música lo más alto que pude, no quería saber de nadie solo irme de la realidad.
Sin darme cuenta me dormí, al despertarme ya era media noche y no quería seguir durmiendo, así que salte por la ventana y me dirigí a Blackwood, tenía la fortuna que unos metros atrás de mi casa ya empezaba el bosque, durante todo el camino no deje de sentirme observada, como si algo o alguien estuviera en los arboles acechando, o estuviera solo unos centímetros detrás de mí, pero al voltearme no había nadie, pero le reste importancia al llegar a la entrada de la cueva, al fijarme mejor, vi ah un alto chico con la mitad del cabello blanco y la otra roja, sentado en una roca mirando a la nada, solo bastó con que diera un paso para hacerlo reaccionar y que viniera hasta mí.
— Tezz qué haces aquí? ya tarde pequeña.
— te hago la misma pregunta.
— yo pregunté primero- dijo pasando su brazo por mis hombros.
— no podía dormir- dije agachando la cabeza.
— porque pequeña?
— suspire- no lo sé- me senté en el pasto húmedo y frío bajo el cielo nocturno, levante mi cabeza para observar las hermosas y brillantes estrellas, el solo se sentó junto a mi he hizo lo mismo, puso su mano sobre la mía y con eso entendí que sabía que si me pasaba algo- es que, con esto del estúpido baile de Sairus y mi familia volviéndose loca, haciéndome ser alguien que no soy, no me gustan los tacones, y la etiqueta me da igual, no entiendo tanto escándalo por ese absurdo baile- lancé una piedra contra un árbol y me lo quede mirando fijamente.
— y que quieres tu- me miró fijamente, él lo sabía, pero quería escucharlo de mí.
— quiero mandar a la mierda todo- lance otra piedra, pero esta vez más fuerte- quiero mandara la mierda los tacones, los vestidos, la etiqueta, pero más que todo QUIERO MANDAR A LA MIERDA AH ESE ESTUPIDO DE SAIRUS- me había levantado y tome una piedra enorme con mis dos manos y la lancé quien sabe a dónde.
— hey, hey, hey, cálmate Tezz, tú no eres así, si, te molesta pero y que, ellos te pueden decir lo que quieran pero tú serás la que decida si quieres ser lo que ellos quieren o lo que tú deseas, y mira tal vez no fue con mala intención, tal vez sólo estaban emocionados ya que invitaron a TODAS las jóvenes de la ciudad- amaba a ese tonto siempre sabía qué decir, él seguía sentado en el pasto y yo me senté en sus piernas mirándolo fijamente, con mis piernas a cada lado de su cintura, para luego abrazarlo fuertemente, no sé qué haría sin él.
- yo....- iba a decir algo pero el me interrumpido.
— lo sé, no te preocupes siempre serás mi pequeña- me abrazo más fuerte y yo sentí que algo dentro de mí se encendía, sus palabras lograron hacer que una pequeña chispa de encendiera en mi corazón, tal vez no sea nada, tal vez solo es cariño ya que conozco a este tonto desde los 8 años y con su personalidad es imposible no amarlo.
Nos quedamos así por un tiempo, disfrutando de ese gran y cálido abrazo que solo un mejor amigo te puede dar, ese que cariño que solo existe en esa persona que llamas hermano de otra madre, esa calidez que se disfruta cuando se abrazan, no la cambiaría por nada, solo existe en esa persona y por eso un mejor amigo es irreemplazable, solo él te puede dar tanto amor sin siquiera compartir sangre, por eso amo a ese tonto, mi tonto.
Narra?????
Vi toda la escena, mi pecho dolía y sentía como mi corazón se rompí en miles de trozos, como se volvía basura, como se volvía nada, pero no importa, no será ahora, ni mañana, pero esa castaña ojimiel, será mía.
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Serás mí reina
FantasyTezz,una pequeña campesina, que ayudaba a sus padres con las cosecha y a su madre con la costura. Un día el príncipe decidió hacer un baile invitando a todas las niñas de aquella ciudad, Tezz no le interesaba ir a ver a ese malcriado príncipe, Sair...