3.

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Jamás en sus veinte años, el Rey le había llamado para reunirse con él en su oficina.

No sabía que esperar, tal vez lo expulsarian del Castillo o quizá lo mandarían a decapitar.

Cualquier cosa sería mejor que permanecer ahí.

"Estar muerto es mejor que estar vivo y ser tratado como un muerto, ¿no?."

Cuando la puerta se abrió, no reaccionó más que bajar la cabeza, estaba ante su padre, pero sobre todo ante su Rey.

-Siéntate. Demandó el soberano.

Él obedeció.

-Yoongi, ser parte de la sangre azul es un peso sobre los hombros, debes imponer respeto y paz al mismo tiempo.

Eso lo comprendía, ¿Pero a qué venía el tema?.

-Tú eres y siempre serás mi hijo.

Esa oración le sorprendió, jamás había escuchado al Rey llamarle de esa manera, le hizo sentir raro, incómodo. No pudo no alzar la mirada y observar al hombre que permanecía frente a él, con semblante frío y sin reacción.

-Pero las reglas de nuestro Clan son absolutas. No puedes ocupar el trono.

Lo sospechaba, sí, nadie quería que alguien con "sangre sucia" lo gobernara.

¿Un Omega?, ¡¿Rey?!.

-Aunque, también tengo muy buenas noticias.

¿Qué podría ser tan bueno como para olvidar que aún siendo el primogénito, prefieren a cualquier otro para ocupar el asqueroso trono?.

-Hemos recibido una carta en petición de tu mano, así que te casarás muy pronto.

Espera...

-¡¿Qué?!.

Fue lo único que atinó a salír de su garganta.

Cuando salió de las oficinas del Rey, camino en dirección a su refugio, su mente no dejaba de pensar en las palabras del Rey.

"Tu deber como miembro de la familia real Min, es aportar beneficios para con tu pueblo"

Maldición.

"Y tu deber como Omega, es dar hijos"

Eso fue la gota que derramó el vaso, ¿porque carajos siempre trataban a los Omega como encubadoras andantes?.

Sus pensamientos fueron abruptamente interrumpidos por una voz que desgraciadamente él conocía a la perfección.

-Vaya, Príncipe, que agradable verlo rondando en el castillo-. El todo de sarcasmo no le pasó.ñ desaparecido.

-Ma Ri.

La Alpha sólo sonrió y se inclinó a modo de saludo. Desgraciadamente todavía debía de ser respetuosa con el maldito Omega, porque a pesar de todo seguía siendo el Príncipe, aunque estaba feliz porque pronto se desharia de él.

-Felicidades por tu matrimonio, estoy tan feliz por usted-.

La Alpha le sonrió de una forma "dulce", pero Yoongi sabía perfectamente cuáles eran las intenciones de la mujer. Era claro su desprecio, ahora ya no habría obstáculo alguno para que Jungkook tomara el trono.

Sí, la Alpha estaba fascinada con su repentino matrimonio.

El Rey Omega.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora