El Rey Omega.

7.

A mi llegada al castillo Kim todo estaba tan pacífico y callado, solo se podía visualizar a los guardias haciendo rondines.

Nadie lo esperaba, pensaba que todos estarían esperando su llegada, que habría alguna fiesta o banquete especial, todo por él. Pero, nada.

- Príncipe Min.

El líder de la escolta llamó su atención.

- Permítame llevarlo a sus aposentos.

- Sí.

De camino a donde dormiria esa noche, se percató de que todo estaba oscuro, dedujo que todos dormían. Muy en el interior se sintió... triste, nadie lo recibiría, se preguntaba si sería bienvenido en ese Palacio.

Aunque al principio no podía creer que su supuesto prometido impuesto, fuere el Príncipe de Saúl, heredero al trono. Pensaba que le jugaban una broma pesada, pero el lacayo le explicó que sería esposo de un Rey. Eso le parecía absurdo, tal vez porque en su reino estaba prohibida la relación de un Alpha con un Omega, ¿en Seúl no?.

Subieron bastantes escalones y recorrieron varios pasillos para dar con sus aposentos. Cuando estuvo dentro no pudo evitar mirar y apreciar cada minúsculo detalle de la habitación.

Cuadros espectaculares, tan coloridos y llamativos, muebles de la más fina madera, las sábanas de seda que tan solo de mirarlas podías sentir la suavidad envolvente, era tan diferente a su antigua habitación.

- Príncipe...

El más bajo miró al contrario, con una interrogante en sus pequeños ojos, miró el estuche.

- Éste es un presente de su Majestad.

Cuando la caja fue abierta, Yoongi se sintió más confundido. Dentro del estuche se encontraba un bellísimo violín color blanco, se veía tan puro y casto, tan vulnerable y delicado.

- Pero, yo no toco el violín.

- Los presentes de su Majestad siempre tienen un significado, por favor, aseptelo.

"Un significado, ¿cuál?."

No sabía si aceptarlo o no, ¿para qué le serviría un violín si nisiquiera lo sabe utilizar?. Al final no tuvo de otra que quedarse con el instrumento.

- El día de mañana será muy ocupado, por favor descanse.

No tubo tiempo de preguntar o argumentar acerca de porque nadie le dio la bienvenida, el lacayo se había marchado tan rápido que parecía que huyera.

Ahora, ¿cómo podría conciliar el sueño?, dormir en un lugar desconocido siempre lo ponía nervioso, más sino conocía a nadie más que a un guardaespaldas.

Tenía que huir de ahí tan rápido como pudiera.

No sabía con exactitud que hora era, pero si sabía que era muy tarde. Se encontraba recostado en las suaves telas de seda, no podía conciliar el sueño, aún que se sentía cansado por el viaje, su subconsciente lo ponía alerta de cualquier peligro inminente.

[Reproducir el vídeo.]

De pronto, un sonido particular llamó su atención. Conocía ese sonido a la perfección, pero pensó que tal vez ya estaba alucinando del cansancio.

Se dejó guiar por la... música, sí, definitivamente era música, y no cualquier música. Alguien estaba tocando el piano a tales horas de la madrugada.

Tan sigiloso como pudo, salió de la habitación y bajó escalones, la melodía cada vez se hacía más fuerte, era tan tranquila y asta cierto punto, triste, pero era hermosa.

Cuando estuvo tras la puerta que del otro lado provenía tal melodía, se preguntó si debía entrar, el amaba el piano y quería saber quién tocaba tal hermosa canción triste.

Cuando por fín se armó de valor, habrío la puerta, y se encontró con un sujeto que vestía una gran bata negra, con cabellos castaños, quien le daba la espalda.

La música se detuvo de repente.

- Bienvenido...

Dijo el castaño, mientras giraba para poder verlo a los ojos.

- Yoongi.

Al fín, se volvían a encontrar.
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¡Holitas bolitas!

Aquí un nuevo capítulo, espero y le haya gustado, final de suspenso😲

En realidad no tengo claro lo que pasará en casa capítulo, sólo escribo lo que mi corazón dicta y manda.

[El vídeo adjunto, no me pertenece, todos los derechos a su respectivo autor (a)]

¡Feliz cumpleaños, Jimin!
Espero hayan tenido un buen #HAPPYJIMINDAY

Nos leemos a la próxima.

AliciaU💜