Boku No Hoseok ↱ʲᵘⁿᶢʰᵒᵖᵉ

11

Ojalá no hubiese aceptado ir a la cita con Jungkook, sentía un malestar dentro de él cada vez que recordaba las imágenes que había visto. Le daban ganas de vomitar y borrar su memoria en un intento de deshacerse aquellas imágenes que tanto asco le hacían sentir.

Pero allí estaba, de pie esperando a la llegada de Jungkook. Cuando Jungkook se fue de casa la otra vez Hoseok lloró, lloró por ser tan patético y aceptar la cita. Debería de haber sido duro con él y pedirle explicaciones, Jungkook dijo que gustaba de él y ese mismo día tuvo sexo con una desconocido. Que mala suerte tenía.

Se mordió el labio mirándose a si mismo. Alomejor se había vestido un poco atrevido, y la verdad, pocas veces se vestía con faldas. Pero esta vez la sintió especial y se puso una falda de color negro, era bastante molesta, sobretodo si intentabas sentarte en forma de indio. Sus calzoncillos se veían a la perfección si lo hacía. Una camisa blanca con unas mangas que le llegaban a los codos, y unos zapatos normales. Si bien no era el rey de la moda él se veía bien con aquel atuendo.

Se bajó un poco la falda porque la veía demasiado alta. No deseaba que le vieran el culo.

Minutos después vio a Jungkook ir hacia él con una cesta en su mano. Era bastante grande, y Hoseok supuso que tendrían una cita en plan picnic. Hoseok no esperaba que él lo llevara a un restaurante donde servían raciones pequeñas y los precios eran caros. Sonriendo Hoseok se acercó a él.

—Hola —dijo tímido.

—Hola —Jungkook se quedó mirándolo a los ojos por largos segundos para luego decir: —Estas muy guapa.

Y Hoseok se ruborizó, aunque él hubiera preferido escuchar "guapo" en vez de "guapa".

—¿Vamos? —preguntó Jungkook y Hoseok asintió.

Comenzaron a caminar por la tranquila calle. Seguramente iban a ser las siete y la gente ya volvía a su casa a disfrutar de sus seres queridos. Caminaban bastante separados el uno del otro, Hoseok porque se sentía un poco incómodo y Jungkook por timidez.

Jungkook estaba perdido en sus pensamientos mientras a veces miraba de reojo a Hani, tragó saliva. Los nervios recorrían su cuerpo, iba a llevar a Hani al parque a cenar con él y no sabía si a ella le iba a gustar.

En otra parte de la ciudad…

—No, no te lo voy a decir —sentenció Taehyung con el ceño fruncido.

—Vamos Tae, somos amigos. ¿Donde esta Hoseok? Sólo quiero hablar con él —dijo el chico.

—No te creo —espetó Taehyung.

—¿Es enserio? Tengo pareja, no quiero nada con Hoseok.

—¿Y quien me asegura eso? —la mirada de Taehyung fulminaba al chico delante de él.

Él, el ex de Hoseok se había presentado en casa de Taehyung reclamando ver a Hoseok. Y claro que Taehyung no le iba a decir donde vivía, no quería ver a Hoseok sufrir.

—Tae… por favor. Te juro que sólo quiero verle y disculparme. Te lo suplico, hazlo por mi. Dime donde vive, por favor —se arrodilló delante de Taehyung con su mirada de cachorro.

—Agh, vale. Pero como lo vea llorando te mataré —el chico asestabaentusiasmado.

En el parque…

Jungkook había extendido una manta en el pasto y se había sentado. Luego le hizo una seña para que Hoseok también se sentara.

Ahora los dos estaban poniendo la cena en orden. Jungkook había traído un altavoz para poner música y crear un ambiente "romántico". Hoseok no se quejó. Él sacó el ramen que Jungkook había llevado para cenar, y tuvo que reprimir una estruendosa carcajada. El ramen estaba hecho, pero estaba frío. Pobre, aunque tampoco se quejó.