No Puede Ser

Cumpliendo propósitos

-Lia, solo tenémos veinticuatro horas y lo vamos a conseguir- respondí sin mirarla, iba a toda prisa, me negaba a perder tiempo con negatividad.- relajate, todo va a salir bien, confía en mi.
-Pero este sitio tiene que arreglarse y no da tiempo en solo cinco días.
-Lia,  yo he preparado más bodas, tranquila, que lo voy a conseguir- dije parándome un momento a reposar debido al dolor.
-¿Estás bien Aimi?- me ayudó a incorporarme.
-Si, vamos a ello- respondí recuperandome.
-Deberías descansar
-No- respondí a la llamada entrante- si, quiero que traigáis el barco... El que pedí... no ese no... el que acordamos- miré a Lia- sentemonos un rato- dije sentandome en una terraza.
-Deberías ir al médico.
-Todo está bien Lia, no te preocupes por minucias- le mostré la carpeta con todas las imagenes del lugar ya decorado por ordenador
-¿Así va a quedar?- me preguntó sorprendida.
-Parecida-respondí.
-¿Puedes respirar Aimi?
-Si, con dificultad, pero si
-Voy a llamar
-No llames por tonterías- me levanté- vamos a tu ultima prueba del vestido.
-Hemos hecho ya como siete.
-Tiene que quedarte perfecto- respondí cortante.
Llegamos al hotel y ahí nos metimos en la sala reservada para los organizadores. Yo sabía  que el vestido adaptado a su cuerpo a la perfección, soloque había una cosa que me quería ocultar a pesar de que ya lo sabía, por eso hacía varias pruebas, en ese momento llegó Sara.
-Buenos días, ya lo tenemos casi todo listo.
-¿Y el barco que pedí?- preguntésin mirarla.
-Si, es lo que nos queda decorar y estará listo
-¿Cómo barco?- preguntó
-Creeme, va a ser una pasada- por primera vez nada más mirarla me entraron ganas de sonreir, para que viera que realmente estaba todo bajo control, ella sorprendida, me devolvió la sonrisa. - estás perfecta Lia, mañana vas a brillar.
-Gracias Aimi- dijo cogiendome de las manos y con intenciones de llorar.
-No llores, por favor- dije manteniendo la compostura.
-Bueno Aimi, esta tarde me encargo yo de todo, así que vete a descansar.
-Mañana nos vemos Lia- sonreí y me fuí.

-Lia, arriba- dije tocando a su puerta, ella nos abrió con ojeras, yo miré a Tarik con una sonrisilla- tranquila Lia, tenemos tiempo- ella solo asintió y nosotras entramos para vestirla, empezamos por el maquillaje y luego el peinado, luego seguimos por ponerle el vestido. Tengo que decir que estaba preciosa, parecía una muñeca a punto de casarse. Estaba nerviosa, como todas las novias que atendí, pero la intentamos calmar como pudimos. Parece que no, pero tardamos unas tres horas en prepararla y por su puesto preparar a las damas de honor, las cuales estaban incluso más atacadas que la propia novia.
-Tendríamos que ir saliendo ya- me informó Tarik.
-Solo debemos ponerle  los tacones y listo.
Salimos de la casa prefabricada, miré hacia el el peñón que había, donde pude ver que todos estaban ya listos y esperando a la novia, al momento llegó su padre quien la miró con lagrimas en los ojos, sin duda ver a su niña vestida de novia, por una parte dbía de ser un palo, porque ya no solo era el único hombre que la tendría y también porque por fin el deseo de ver a su hija casada, se había cumplido.
Lia enlazó su brazo con el de su padre y emprendieron el camino hacia el altar.
-Todo vuestro chicos- mientras Macarena, Sara y Tarik estaban en la boda, Sergio, Eme y yo, nos dirigimos al hotel done sería el concurso. El pabellón era enorme y sin duda estaba muy bien decorado, algo que en cierto modo me dio envidia, ya que yo había organizado una boda a la vez, nos mostraron donde estaban todos los participantes y nos enviaron a la zona donde estaba colocada la ropa. Empezamos a trabajar vistiendo a todos nuestros modelos y luego pasamos a la zona de maquillaje, sin duda lo habíamos preparado y ensayado de manera que tuviésemos veinte minutos de margen, para repasar todo y ya de paso ver las colecciones de los demás.
-¿Estamos deacuerdo entonces?- me preguntó Eme, yo asentí mirando a Sergio, le cogimos cada una de una mano apartandolo a un riconcito.- Sergio, tenemos que hablar.
-¿Qué pasa, no me diréis que me vais a despedir?- sonrió nervioso
-Verás...
-Vas a presentar tu la colección- corté a Eme
-¿¡ Yo, solo !?- gritó, todo el mundo nos miró con cara de sorpresa ante semejante grito, pero al momento volvieron a sus asuntos.
-No estoy preparado.
-Si lo estás, te hemos estado preparando para esto todo este tiempo- respondió Eme.
-No puedo hacerlo sin vosotras chicas.
-Si puedes, ahora es cuando tienes que sacar esa confianza y ese desparpajo que levas dentro.
-¿Por qué me decís esto ahora?
-Porque este es tu sueño desde que empezaste a trabajar con nosotras.- respondí
-Sabemos que tienes un blog y subes todo lo que piensas de nosotras y de tu trabajo.
-¿Cómo lo habéis encontrado?
-Se lo pillamos a tu hermana- respondió Emeli
-Pero...
-Nosotras ya hemos cerrado un ciclo, Sergio- sonreí
-Ahora os toca a tu hermana y a ti.- dicho esto, le dimos la llave del estudio- tu contrato te espera mañana en el estudio.
No dijimos nada más, solo nos encaminamos hacia nuestros asientos reservados y esperamos a que empezara todo.
La decisión de pasar nuestro negocio a los gemelos, fue una idea muy premeditada que nos causó varios quebraderos de cabeza tanto a Tarik, Sara, Eme y a mi, sin duda era lo mejor que podíamos haber hecho, porque sin duda, los dos hermanos tenían el potencial necesario para conseguir que el negocio siguiese su camino hacia delante. Por su puesto, nosotras seguiríamos siendo parte, pero seríamos accionistas de solamente el veinte por ciento, entre las cuatro. Este nuevo paso sin duda nos beneficiaría a todos, a ellos porque eran jovenes con ideas brillantes y a nosotras porque nuestra vida había tornado en nuevas direcciones. Cada una de nosotras sabía cual era su futuro.