Capítulo V
La vida después del dolor
La luna se ocultaba tras un montón de nubes grises que se asomaban desde lo alto de
los árboles, todo había sido como una terrible pesadilla de la que era imposible
despertar, Santiago se había ido a manos de dos sinvergüenzas que buscaban dinero,
no solo eran dos malhechores, eran dos conocidos, no podía entender cómo pudieron
ser capaces de tomar una vida a cambio de dinero, y para colmo, ambos estaban
muertos, pero eso no lo llenaba de consuelo, quería a su padre de regreso y no solo a
él, su madre había caído presa de los nervios y dela depresión, no había dicho una sola
palabra desde que los policías le habían informado que su esposo no vivía más. Carlos,
por otra parte, no le dirigía la palabra para nada, todo lo que le escuchó decir frente al
ataúd fue: «le dije que no lo hiciera, es toda su culpa». Entendía que su hermano
buscara a quien culpar, pero ¿Por qué a él?, ¿Qué no se daba cuenta que en este
momento lo necesitaba para apoyarlo? Esperaba que no pasara mucho tiempo antes
de que su hermano notase cuanta falta le hacía estar cerca de él y de su madre, que
era momento de estar más unidos y fuertes que nunca.Se recostó en su cama, pensó en ese extraño pincel con alas que su mamá colocó
en su ataúd antes de bajar el cuerpo, recordó la pesadilla que había tenido apenas unos
minutos antes de que todo sucediera... ¿Qué había sido eso?, no había sido como en su
sueño, pero las palabras que decía el padre Dante... ¿Acaso alguien o algo trató de
advertirlo?El regreso a la escuela no fue más sencillo, en su intento de ser amables, todos lo
miraban con una cara de profunda lástima, había una chica en particular, Lucía, iba en
el mismo salón que ellos, era bastante más sombría que los demás, incluso bastante
más que ellos, era la única persona que no los miraba como bichos raros, ellos ya
habían mantenido algunas conversaciones con ella; de hecho le agradaba mucho y
ahora le agradaba aún más.Dos años antes Lucía había perdido a su padre, se había suicidado de un tiro con
una escopeta, y dos años antes que eso había perdido a su madre cuando está se
encontraba dormida, pero todos sabían que detrás de la muerte de su madre una
historia muy oscura se encontraba, todo era un secreto a voces; Julián, su padre, había
encontrado el cuerpo cuando llegó del trabajo, pero durante la autopsia los médicos
notaron un sin fin de moretones viejos y nuevos, huesos astillados, dientes postizos,
parecía que por años la señora Alondra fue víctima del abuso constante de un hombre
ruin. Todos en el pueblo creían que Julián habría matado a su esposa y lo supo
encubrir de manera que no pudieran probarlo; con lo del suicidio de alguna manera
confirmaron que no pudo vivir con el hecho de cargar con la muerte de la madre de su
hija. Como sea que hubiera pasado, Lucía no hablaba mucho del tema, no hablaba
mucho de nada en general, pero ese tema parecía ser un tabú en la escuela, se tuvo
que mudar con sus tíos, quienes eran buenas personas, pero ella jamás volvió a ser la
misma; empezó a vestirse de manera gótica, todo el tiempo leía cosas referentes a la
brujería, cosas relativas a energías del más allá e incluso libros sobre la cultura egipcia,
y el libro de los muertos. Ese día le dijo unas palabras que lo dejaron pensando por
horas, pues tocó su hombro de manera tímida:-Lamento mucho lo de tu padre; yo entiendo que es lo que sientes -le dijo.
-Muchas gracias, sé que me entiendes, pero sinceramente, no sé cómo has
logrado sobreponerte -Ie contestó él.-Te equivocas, de ninguna manera lo superas, yo diría que aceptas de manera
obligatoria a que esa persona ya no está, pero las dudas me carcomen todas las
noches.El la miró extrañado, no sabía si ella se refería a lo mismo que a él le pasaba, si las
preguntas eran las mismas ¿De qué estaba hablando?
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ALMAS DE HIELO:MUERTE Y PECADO
Tajemnica / ThrillerHISTORIA ORIGINAL Después de una muerte inesperada una pareja de hermanos y una amiga se envolverán en un mundo de misterio y hechizos que se encuentra en el interior de una secta siniestra en pequeño pueblo Tras encontrar la manera de vencer a la m...