La casa estaba decorada con muchas flores y cuadros de pinturas de los alrededores, mostrando el castillo siempre al final, junto al sol. Los muebles de madera se miraban muy hogareños con el color brema de las paredes y el olor a comida caliente y a pan recién horneado, daba tranquilidad.
De nuevo, me siento culpable por mis pensamientos.
—Lamento el desorden, no esperaba que el rey me visitara —rio nerviosa, levantando las pocas prendas en regadas.
—No te preocupes, no venimos a ver tu ropa interior —dijo Eros en broma, pero solo logró que Sunny se sonrojara.
—No suelo dejar todo tirado, pero cuando me enteré que la señora Mercury había entrado en labor de parto, corrí a cuidar a sus hijos.
Observé sus movimientos torpes, hablando nerviosa, evitando mirarme o a Eros, mantenía la cabeza agachada. Al principio creí que era porque la intimidábamos un poco, pero al verla reaccionar tan alterada al tenernos en su casa, fuera de la vista de los demás, pude ver que era miedo de estar con dos "asesinos".
¿Por qué no me sorprende? Sunny es era una niña que no podía ni comer carne porque pensaba en la pobre vaca que murió, dijo que sería una hechicera protectora de la naturaleza toda su vida porque no soportaba la muerte. Esta Sunny es igual a pesar de haber crecido.
—No vamos a tardar, solo queremos información sobre tu hermano —dejó caer la ropa a sus pies, mirándonos por primera vez a los ojos.
—¿Caleb? Él... él volvió, ¿cierto? —preguntó preocupada.
—Si, volvió para secuestrar a la princesa de la segunda familia real —me crucé de brazos, estudiando su reacción.
—Vaya... —susurró y se agachó para recoger la ropa. Miré sus manos con pequeños cortes y una bandita en su palma— No sabía que él había tomado ese camino. Digo, papá dijo que estaba comenzando a ver que algo lo perturbaba, pero nunca me imaginé que sería algo tan serio. Siento no poder ayudarlos.
Sus pasos eran lentos, quería parecer segura pero el nerviosismo se lo impedía. Cada una de sus acciones eran raras, como si algo más le pasara. Eros debió pensar lo mismo porque se mantuvo pegado a mi lado y le hizo señas a Kit para que cuidara mi lado izquierdo, ambos atentos a Sunny a pesar de que esta no era consciente de la guardia.
—¿Sabes donde podría mantenerla cautivada? ¿Algún lugar al que él frecuentaba? —le pregunté. Ella dobló la ropa con extrema lentitud, tomándose su tiempo en cada doble.
—No, ninguno —respondió.
Estoy comenzando a impacientarme, ella no está haciendo nada mas que ponernos nerviosos y perder el tiempo.
—¿Dónde están sus padres, señorita? —preguntó Kit. Sunny dejó de doblar por unos segundos antes de respirar hondo.
—Ellos viven lejos, decidieron mudarse cuando mamá enfermó y sus poderes ya no la curaban del todo.
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Príncipe Desterrado. [TERMINADA]
FantasySylver, el príncipe desterrado, está cansado de las reglas del mundo mágico. La organización fue creada para que los demi-âme y hechiceros pudieran comenzar una vida nueva, junto a los humanos en vuestro mundo ordinario. Sin embargo, el romance ent...