Mineta Minori es un ser atroz, el terror para todo hombre que este dentro de su radar.
Cuiden sus espaldas y sus gansos que Mineta no sabe que es esa cosa tan extraña llamada privacidad.
❁Mineta! Fem
❁Palabras malsonantes.
❁Intento de comedia
❁Mucha...
—¿Por qué estás aquí en realidad? ¿Qué quieres conseguir?
—Quiero utilizarte para sentirme menos miserable, ya sabes, tú eres un perdedor como yo. Además tu frente me excita, quiero llenarla de besos. Por por mis nalgas, que no miento —confiesa sin dudar Mineta, su mirada se hallaba pérdida en el suelo como si fuera lo más fascinante de la habitación—. También creó que te tengo en la bolsa y ya contigo podría tener sexo, además quiero saber el tamaño de tu...
Antes de terminar la palabra, Shinso cubre la boca de Minori; él sabía que no estaba bien utilizar su quirk, sin embargo esto si lo amerita. Sin duda después de esto no quiere relacionarse jamás con Mineta Minori.
—Escuche suficiente. Sólo vete a tu habitación y date una bofetada a ti misma.
Ella da una vuelta sobre su talón y acata la orden sin demora, se pierde entre la masa de estudiantes que transita por el comedor y recién Hitoshi se permite respirar con normalidad. No entendía como alguien tan despreciable había podido llegar al curso de héroes y todavía algo aún más enigmático que eso: ¿Cómo Midoriya podía considerar amiga a alguien como ella?
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Era humillante.
Lo que nunca se atrevía a hacer Mineta Minori, siguiendo su inquebrantable filosofía de nunca arrepentirse de sus acciones y jamás revelar sus verdaderas intenciones hasta el momento propicio, todo eso, se había ido a la reverenda mierda cuando Shinso utilizó su quirk. Y sabría Dios si confesó secretos más oscuros.
Así que Shinso estaba descartado hasta nuevo aviso y debería continuar con Tetsutetsu Tetsutetsu.
La investigación previa dio sus frutos y para su sorpresa tenía gustos en común con él además de que le resultaba muy de su tipo: Optimista, fuerte, apasionado y protector como una mamá osa. Cada vez que iba a perseguirlo durante los recreos, sentía que sus mejillas se calentaban cuando lo veía hablar o con el simple hecho de verlo respirar.
Quería hacer bien las cosas ahora. Daría lo mejor de sí para no pensar en las nalgas de Bakugou mientras estaba con él, sentía que por primera vez experimentaba algo más que simple atracción física o un capricho como la mayoría de veces. Sólo tal vez, por primera vez se enamoraba.
—¿Oh? ¿Pero qué ven mis ojos? ¡Es una chica de la detestable clase 1A!
Por un demonio, lo que faltaba.
—¿A qué has venido, pequeñita? —cuestionan una vez más a escasos centímetros de su cara— ¿Acaso quieres intentar un movimiento con Awase porque te diste cuenta que él es genial por estar en la clase 1B? ¡Porque nuestra clase es mucho mejor que la 1A sin duda!
Monoma no paraba de parlotear de lo grandiosa que era su aula mientras Mineta sólo anhelaba ir con Tetsutetsu antes de arrepentirse de su idea de poner todo su esfuerzo en otra meta, aparte de ser una heroína respetada, por ello intento esquivar con cautela al escandaloso rubio para llegar al chico de cabello plateado.
