Capítulo 27: Sueños

917 69 6
                                    

Anna

Cuando era más joven, en el tiempo que no sabía que tenía el diamante, desee que mi vida fuera un poco más interesante, más mágica, y romántica, pero que chica no desea que todo sea como un cuento de hadas, que ha magia exista y haya un felices para siempre oculto detrás de cada escena.

Pero cuando lo desee, no sabía verdaderamente lo que pedía.

Ahora que soy una diosa, ahora que tengo a alguien quien en verdad me ama, ahora que estoy en los territorios salvajes del inframundo, con mi mejor amiga a mi costado, buscando de alguna manera poder salvar a mi hijo sin perder a nadie en el intento, añoro mi vida antigua.

Ritter y Blake lideran el camino, sin hablarse, sin siquiera mirarse en confirmación de direcciones, Lena y Andre están detrás de ellos, dejándonos a Dianna, Nat ya mí al final.

La pequeña está dormida en brazos de su madre y solo ruego que no haya nada malo destinado para ella, porque de ser así no me permitiría escoger entre saber la verdad, o tener que fenecer en manos de mi hijo.

Nat sostiene en brazos a su pequeña, con gesto, más protector que maternal, haciéndome ver claramente su cambio, haciéndome ver claramente que ya no soy humana. Ella está un poco más alta, sus facciones dejaron todo brillo de la adolescencia para convertirse en las de una mujer, pero aun así puedo ver rasgos de su antiguo yo, pero el cambio más notable se da en lo que oculta sus ojos, atentos, cautelosos.

―Lo siento ―se escapa de mi boca y antes que pueda detenerme mis pensamientos vuelan fuera de mi mente hechos palabras―, nunca debí involucrarte, nunca debiste conocerlos, casi te hacen lo mismo que a mí, te deje con todo ese peso a ti sola y…

Oigo su risa, es leve y algo apagada pero es real.

―No cambias ―bajo la mirada, ella suspira―, no me refiero a tu cuerpo, ya sabes, sigues sin tener filtro cuando tus pensamientos explotan.

Me calló. Mirando de reojo a Nat.

―No tienes porque sentirlo, y a pesar de todo esto, no me arrepiento de haberme enterado, ne me arrepiento de nada porque la tengo a ella.

Su mirada cae dulcemente a su hija. Y admito que tengo un poco de celos, pues nunca tuve a Cameron de esa forma.

―Fue mi culpa que Andre…

Ella suspira, apretando a Diana más contra su pecho.

―El no debió hacer lo que hizo, entiendo sus razones pero no fue tu culpa… en verdad no se a quien culpar, si a él o a mí o al mundo pero… no quiero preocuparme por eso ahora ―acomoda a la bebe en un brazo y toma mi hombro con su mano libre―, Cameron es lo más importante en este momento.

―Gracias Natalie… por criarlo.

Ella sonríe.

―Fue un placer.

Caminamos un rato más en silencio, quizá no un incomodo silencio pero el ambiente era pesado, tanto como la espesa neblina que nos rodeaba.

―Maldición ―la voz de Ritter rompe el silencio―, Nat, dale la bebe a Athena.

Nat y yo nos miramos, pero ninguna cuestiona lo que dice conforme vemos a los chicos aparecer sus armas delante de nosotras, llamo mi espada acercándome a Natalie mientras ella le tiende a Dianna.

―Lena cuídalas.

Nat sacude la cabeza.

―Te perdiste unas cosas Anna. ―dice mientras se reúne al círculo que protege a Lena y Dianna conforme ella crea un campo de protección a su alrededor.

Be Forgotten (Be #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora