Capitulo 5 - "Él, su mano y... ¡Es solo un sueño!"

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(Hannah)

Una sensación de tacto, fría y suave, recorría mi cuerpo. Intentaba abrir los ojos pero algo me inhibia mi visión.
En ese momento senti una puerta abrirse, unos pasos, de nuevo la puerta pero esta vez ,cerrarse; para que luego percibir un peso en la parte de los pies de la cama. Unas manos, obviamente por el tamaño y asperocidad, masculinas que subian lentamente por mis piernas. "¡Oh Dios! ¿¡Estoy desnuda?!". Mi yo mental se agitaba mientras mi respiración se aceleraba, lentamente sentía como sus manos subían y bajaban desde mis tobillos hasta mis rodillas. A pesar de lo torpe y toscas que sus manos eran, su contacto era suave y cálido.
Lentamente sentía como de nuevo subían poco a poco, su respiración se agitaba cada vez más, su tacto era más firme...ya no era la misma sensación de aturdimiento, confusión ni nada por el estilo. Era placentero y estimulante. Miles de pensamientos invadieron mi mente.

siento como el peso de la cama incrementa y mis piernas son separadas para sentir como reposa sus labios sobre mi pierna y lentamente va subiendo, dejando su respiración húmeda y tibia; siento un calor y escalofríos recorrer mi cuerpo con cada beso marcado; a medida que sube mis ganas de confirmar a quien le pertenecen esos labios mis ganas de querer más tacto aumentan.

Se detiene una milésima de segundos sobre mi ropa interior y siento como lentamente empiezo a humedecerla, suelta una risa burlona y empieza a pasar su lengua caliente y húmeda por arriba de la tela de arriba a abajo, jugueteando con mi sensibilidad y el elástico. Al cabo de unos segundos sigue su juego de provocación, yo con un casi orgasmo en la punta de la lengua se detiene mientras deposita su cálida respiración sobre mi vientre, va generando miles de sensaciones. Sube por mi ombligo y me encojo un poco, pasa por mis pechos y deja un beso en cada pezón sensible y se detiene sobre mi cuello, dejándome lamer y morder en esa zona que es mi debilidad.

Un gemido se escapo de mis labios pero el lo cayó al comenzar besándome.

Era el beso más ardiente de mi vida, pero lo peor era que no podía abrir mis ojos, aún así me dejé llevar por la tremenda pasión que me rodeaba.

-Hannah.

Reconocí ese voz, era él.

-Bruno.

Dije en un suspiro.

De nuevo me besó apasionadamente para alejarse y empezar a quitar lo que tenía en mis ojos. Cuando logré abrirlos me di cuenta que todo había sido un sueño.

-Hola, cariño, ¿Que tal el sueño?.

La voz de Bruno retumbo tanto en la habitación, como en mi cabeza confundida por aquel sueño. Me levante de golpe y eso hizo que tuviera un mareo haciéndome caer de nuevo a la silla.

La preocupación de Bruno lo hizo moverse rápido.

-¿Estás bien?

-si.-No lo quería ver a los ojos.- Me ha tomado por sorpresa su presencia.

Lo miré, él sonreía de forma pícara mostrando su hoyuelo derecho.

-Me quede dormida; doblar turno me deja agotada y entre al consultorio de usted porque nadie entra aquí... Puse mi alarma para irme antes de que usted llegara pero...

Estaba nerviosa, demasiado no quería perder mi puesto y menos por culpa de un sueño.

-Calmate.- Dijo poniéndose de pie.- Pase a dejar unas cosas de imprevisto al consultorio de a lado y te vi por la ventana.- hizo una pausa y saco de su bolsillo trasero mi identificación.- Deberías de tener más cuidado en donde dejas tus cosas, está identificación debe ser protegida como si fuera tu vida.

Por mi parte me encargué de tomarla apenada de sus manos para ponerla en mi uniforme a veces solía ser muy distraída.

-De verdad lo siento tanto.

Dije apenada caminando Hacia la puerta, la persiana de la ventana estaba cerrada. Yo la había cerrado por cuestión de descanso me giré y su dorso choco con el mío.

-Se lo que estabas soñando.

Su voz chocaba contra mis labios, mi corazón Latía demasiado fuerte.

-No... No sé de qué me está hablando.

-Vamos hannah

-Bruno...

-Exacto, eso gemías.- se acercó a mis labios- Mi nombre.

Y cerro nuestro círculo en un beso.

Las piernas se me debilitaban y las manos de él no ayudaban parecía que me iba a derretir.

Pero nuestro beso fue interrumpido por los golpes de la puerta.

-Doctor, su padre lo espera.

Aturdida por el calor o los besos de Bruno, me hice aún lado y él salió del consultorio sin decir palabra alguna,dejando su perfume acompañandome. Estupefacta,Salí del lugar sin que mi cabeza deje de dar vueltas. "¿qué se creía?, ¡es mi jefe!... Pero es lindo... !NO, BASTA!"

Ya en mi departamento tardé unas horas en dormirme, agradecía que mañana sea mi día libre.

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¡Aloha Y'all!

Perdón por tardarme tanto, pero estoy estudiando para prepararme para la universidad y en el colegio me están llenando de tarea, el que dijo "ya fue, es sexto" estaba equivocado 😑😑

Espero que les guste 🌚🌚🌚🔥🔥🔥

Foto de Bruno agarrándose la carrot pal ambiente 🌚🔥🥕🥕🥕

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Foto de Bruno agarrándose la carrot pal ambiente 🌚🔥🥕🥕🥕


¡ Love ya! ❤❤😄

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