Era amor.

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—No, es imposible.–Sasuke negó con la cabeza y miro a su hermano—¿Sabes lo delicado que es esto, Itachi? Decir que la amas... Solo así como así. –mordió su labio. Itachi suspiró.

—Te lo contaré con lujo de detalle para que entiendas, Sasuke.–el mencionado lo observó con una ceja alzada y asintió.—Todo comenzó cuando se supo de la existencia de Sakura...

Flash Back

—Es bueno ver que todos hayan llegado puntualmente.–dijo Pain mirando con fastidio a Hidan.

—¡Qué! Siempre llego tarde por culpa de Hakuzu.–justificó.

—Eres un inepto, Hidan. Tus rituales son un fastidio y siempre nos demoran.–contestó Hakuzu.

—Hmp, dejen de perde el tiempo.–dijo con fastidio Sasori—¿Para qué nos llamaste a todos si aún no capturamos a los jinchurikis?–preguntó a Pain.

—Es precisamente por eso. El momento a llegado... Todos los bijus serán reunidos.

—Hemos descubierto la ubicación del 9 colas–habló Konan—Es necesario capturarlo primero, es el más poderoso y por lo mismo, nuestra prioridad.

—Itachi es quien debe traerlo, vivo.–ordenó Pain.

—Oh, ¿será que nuestro deseado 9 colas esta en konoha?–preguntó Kisame.

Pain asintió y miro a Itachi—Debes ir por él a la brevedad posible, es el ingrediente principal.–Itachi asintió y comenzo a caminar, sin embargo, Pain comentó una cosa más. —Primero debes matar a su guardaespaldas, es una ninja de la misma aldea; una ANBU. -El azabache lo miró. —Se llama Sakura Haruno, esta bajo las ordenes de un tal Danzou. —Itachi mordió su labio y emprendió su viaje a Konoha sin Kisame.

No era necesario que le dijeran los detalles de la chica, Pain sabría como hacerle llegar todo eso. Estaba totalmente desinteresado en aquello, aún si se tratase de Danzou; si, era cruel para esa persona que tuvo la mala suerte de ser la guardaespaldas del nueve colas pero debía obedecer o su plan para salvar a su hermano no funcionaria.

Tardaría más o menos tres días en llegar a Konoha, pero agradecía ir solo ya que todo lo podría hacer a su manera. Llego a la aldea justo en él tiempo previsto y contemplo cada rincón.

—Como cambio todo.–hablo para si mismo. Observo un poco más y continuó caminando no sin antes usar un jutsu de transformación para pasar desapercibido.

Itachi camino hasta uno de los campos de entrenamiento que habían cerca. Según los informes que le dio Pain la guardaespaldas era una chica de no más de 15 años llamada Sakura Haruno. Pan comido.

—¡Sakura!–gritaron a lo lejos e Itachi busco en los alrededores de donde provenía aquel llamado. Quedo boquiabierto al ver como una chica bastante hermosa de cabello rosado caminaba tranquilamente por el campo de entrenamiento, sentía su corazón arder y por alguna razón sintió la ferviente necesidad de hablarle, era casi tan necesario como respirar y, sin darse cuenta, ya había caminado hasta estar justo frente a ella. No podía explicar como era que aquella desconocida le provocara tales sentimientos tan extraños y nuevos para él.

—¿Hola?–Sakura movió su mano de un lado a otro frente a la cara de Itachi, este se asusto un poco y le sonrió tímidamente.

—Disculpa, me pareciste conocida.–dijo haciendo una reverencia.

—No te preocu...

—¡Sakura! –interrumpio una chica de cabellera rubia —¡No me ignores!–dijo molesta

—Ino... – la kunoichi rosada le hizo señas para que su amiga viera al desconocido frente a ellas.—¡Oh! Disculpe mis modales... Emm...

—Rei.–completo Itachi.—Soy nuevo por aquí, he venido desde la aldea de las olas, mucho gusto.

Ino se sonrojo y Sakura solo puso los ojos en blanco, su amiga había caído de nuevo.

—¡Mucho gusto Rei! Yo soy Ino Yamanaka.–la rubia le guiño el ojo.—Y ella–dijo señalando a su amiga—Es Sakura Haruno.

Itachi entrecerro los ojos y visualizo mejor a Sakura. No se había dado cuenta pero cumplía con todos los rasgos que Pain le había descrito, ¿como no pudo darse cuenta antes de que era ella? El no era así.

—Mucho gusto–Dijo Sakura cortés mente.

Itachi trago en seco. —El gusto es mío, chicas.

Habían sentimientos extraños invadiendo cada parte de su cuerpo, no entendía por que y tampoco era como si quisiera averiguarlo. Le gustaba.

Sin darse cuenta, el azabache ya iba caminando junto a las dos kunoichis hablando trivialidades; aquel ambiente era tan cálido y cómodo que no quería dejar de sentir eso jamás.

—Rei, Sakura, debo irme–se disculpó la Yamanaka—Pero espero verte pronto–le sonrió coqueta al ninja y se retiró, el se despidió de lejos y suspiro. Se quedaría solo con su objetivo, su encantador objetivo.

—Así que...

—Rei.–Interrumpió la pelirrosa—¿Podemos hablar por allá?–dijo señalando un callejón no muy lejos de ellos. Itachi asintió extrañado y caminaron por allá. Sakura suspiro y lo miro retadoramente.—Sé que no eres "Rei" y también sé que no vienes de la aldea de las olas.–el Uchiha se quedo boquiabierto por segunda vez en el día, esa chica si que era magnífica.

—Pero que dices–contesto—¿por que habría de mentir?

—Por que eres Itachi Uchiha.

Ok, esto si era demasiado, ¿esa chica podía leer mentes? Imposible... Quizás solo esta jugando, pero, ¿con algo así de específico? Podría ser una coincidencia pero una demasiado buena. Debía pensar en algo rápido o todo él plan se iría al carajo.

—Lo sabía.–la chica lo saco de sus pensamientos y enarco una ceja, Sakura rió—No puedes engañar a una ANBU de élite como yo.–presumió—Tienes un aura igual a la de Sasuke y créeme, nadie podría notar mejor eso que yo.

Itachi deshizo la transformación y siguió callado. Todos esos acontecimientos en un solo día eran un shock mental para el Uchiha.

—¿Qué es lo que buscas?–pregunto mientras se ponía en guardia dispuesta a pelear.

—A ti.–contestó, Sakura abrió los ojos totalmente sorprendida.

—¿Por qué a mi?

—... Eres protectora del jinchuriki–Sakura le lanzó un puñetazo pero Itachi pudo pararlo con su mano y agregó —Pero no puedo entregarte por que yo... Yo...

—¿¡Tú qué!?

—Creo que me gustas.

Sakura lo miro totalmente confundida.

—Pero que carajos...

—Si, lo mismo digo.

Él gran Itachi Uchiha había sido domado por la Haruno y eso solo era él principio.

Cerezo MarchitoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora