(Sé que tengo que aprender a editar este tipo de fotos, se les amaaa. xd)
Sábado; 6:30 PM
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―Que no es para mí.
Escuché que dijeron una de ellas del otro lado la puerta de mi habitación, en el pasillo. Como no quería interrupción subí la intensidad de la música que mi madre consideraba basura, pero que a mí me gustaba. Así era yo y no pensaba cambiar por nada ni nadie. Eso sería como querer quitarme la piel y ponerme otra de un color muy distinto. Algo imposible.
―Ma...zie.
Casi no escuché la mención de mi nombre. Exhalé mucho aire y me encaminé a mi bocina portátil, la cual le bajé el volumen.
―¡¿Si?! ―grité, al erguirme.
Escuché la puerta abriéndose, pero no me molesté en girarme.
―Llegó esto ―era mi madre.
Miré por encima de mi hombro que traía las manos llenas, así me di la vuelta para prestar más atención a lo que tenía; un ramo de unas flores que jamás había visto, una caja y un peluche que parecía medir lo mismo que yo.
―Y no es ni para mí―
Abrí la boca.
―Ni para tu hermana ―completó en cuanto predijo mis intenciones.
―¿Y qué te hace pensar que es para mí?
Ella achicó sus ojos y yo me acerqué a ella con una sonrisa. Me entregó ese reguero de cursilerías y luego me dejó en la intimidad de mi habitación.
Decidí tomar asiento sobre mi cama. Eché las flores extrañas a un lado y le presté más atención a la caja de colores pasión e inocencia, o sea carmesí y blanco, detonaba cierta elegancia y delicadeza. Como si hubiese sido personalizada, por supuesto no a mi gusto porque yo odiaba el rojo. Al retirar la tapa di de golpe con una carta que dentro tenía una nota o ficha― como sea que se llame―, cosa que pasó a un segundo plano en cuanto vi lo que había debajo. Mis ojos se iluminaron.
No me lo pensé y comencé a comer los chocolates que había dentro. Pensé que era un hecho evidente que estas cursilerías no provenían de ninguna de mis metidas de pata. Dudaba que mis citas pasajeras gastasen su dinero en esto en lugar de un motel. Ya me había hartado de azúcar así que para cuando pensaba irme a por un vaso con agua, la nota capturó mi atención.
De seguro esa letra era perteneciente a algún programa de computadora.
You're the sunshine of my life, Emily Tyler.
T. B.Oh, ya había comprendido. Todo esto era para la Sanrra de Emily, esa que a nadie le rompía una taza, pero sí la vajilla completa. El que mandó esto se equivocó de dirección, pero sí que tenía un serio complejo de Romeo. Busqué en mi memoria a algún estúpido con aquellas iniciales. Y no llegó a mi mente una mierda, si casi no retenía nombres ¡iniciales mucho menos! a menos que lo escuchase muy seguido.
Pero quien fuese que estuviese haciendo esto, era un idiota al enamorarse de Emily.
¿La Sanrra?
Pffff.
Pobre infeliz.
*****
(Sanrra) Combinación entre Santa y Zorra.
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Holaaaaaaaaaaaaa.
AAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHBDKWSKJSWJSHWDUHDHE.
Vale, voy a calmarme. ¿Cómo se encuentran? Yo. Estoy. MALLLL.
Tengo que aclarar que el que haya publicado el comienzo no significa que habrá actualizaciones. He publicado esto para CONFIRMARLES que no eliminaré la historia. Antes había dicho que regresaría, no obstante, creo que muchos no lograron leer ese comunicado así que para que no tengan más dudas, les notifico otra vez.
TODOS REGRESARÁN.
Pero el año próximo como había dicho. No daré fecha, no diré cuándo pues no funciono de esa forma y sé que es súper cool hacer eso, pero soy honesta y no quisiera darles ilusiones diciendo que en ''tal fecha'' la historia regresará y al final no sea así. Recuerden que la vida es de lo más impredecible.
Ahora sí.
¡Disfruten del primer capítulo editado y cuénteme qué les ha parecido!
Xxx.
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Corromper a un nerd (novato). [EDITANDO]
Teen Fiction"El niño eligió quemarse. Sabe que terminará herido, pero eso no le asusta porque ha estado helado toda su vida y desea, desesperadamente, conocer una nueva forma de doler." ** Llámame Kenzie, aunque en este c...