Lo que se pueda contar

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Me desperté con una sensación de satisfacción en todo mi ser y al ver a Flor acurrucada a mi lado volví a revivir el momento hermoso y perfecto que habíamos tenido, la sonrisa en mi rostro se dibujó enseguida al comprobar nuestra desnudez cubierta por una sabana, en mi mano todavía su olor me provoco punzadas en mi vientre; me quede mirando ese leve movimiento involuntario en su nariz cuando sueña, es un gesto muy suyo que adoro. Después de entregarnos en cuerpo y alma ni el cansancio podía contenernos pero esta vez le apuntare una victoria; habíamos estado sometidas en un huracán de emociones y nuestros sentimientos se vieron expuestos ante nuestros hijos; experimentar todo eso en pocas horas produce un agotamiento mental, físico y emocional. Este día de las Madres nunca lo olvidare, mis tres amores me hicieron la mujer más feliz del planeta. Deje a mi esposa dormida, me duche, vestí una remera grande, pase por la habitación a ver a mis Bebotes que todavía dormían profundamente; ya había tomado la decisión de quedarnos aunque tuvieran cole al día siguiente. Baje a preparar algo ligero para cenar, el reloj marcaba las 19:30, entretenida en la cocina me asalto la duda de la filmadora, pare lo que estaba haciendo y fui a revisarla ¡Oh sorpresa! Flor y yo nos veíamos demasiado melosas en el set de filmación, imagine la cara de Nair y Gero al ver un momento tan íntimo entre sus madres y mis alarmas se encendieron, era necesario editar aquella puesta en escena no era apta para menores, saque de la filmadora su memoria la conecte a mi laptop y luego la respalde en un pendrive personal, ya más tranquila grabaría una de mis anécdotas para no levantar sospecha. Mi conciencia renuente al engaño me taladraba el pensamiento y recordé las palabras de mi esposa ─ Jazmin del Rio Estrella, aceptas el compromiso de contar o escribir tus más oscuros secretos sin ocultar nada a mis ojos ni a los de tus Bebotes ─ no es un engaño me decía a mí misma en voz alta es omitir información clasificada.

─¿De qué información clasificada estás hablando mi amor?

─¡Pichi! No te sentí ¿Qué cuanto escuchaste?

─Jazmin del Rio, acordate que no sabes mentir.

─Es cierto y tampoco me gusta hacerlo pero por esta vez bien vale la pena, confía en mi hermosa. Hace tres horas que no me das un beso y estoy sedienta de tus labios.

─¡Almejita insaciable ñaa!

─¿Qué debo hacer para que apagues la ansiedad en mi boca? Acercándome lentamente y sin perder mi vista de su mirada comencé adoptar la actitud de un cazador al acecho de su presa, la sonrisa que me brindaba Flor me provoco ternura.

─¿Qué hice yo para merecer esto? ¿Decime? Tomando su cara entre mis manos unimos nuestros labios deseosos de encontrarse.

─Te amo Pichi, sos lo más maravilloso que me ha pasado.

─Yo también te amo mi amor, sos hermosa y perfecta pero te advierto que me estas derritiendo, deja de mirarme así.

─No lo puedo evitar lo siento, estoy tan enamorada, mejor me pides otra cosa.

─Dale, ¿Preparemos algo para cenar?

─Tengo la mitad hecha ¿Me acompañas a terminarla?

─Contigo iría hasta el fin del mundo.

─Perdón por interrumpir su romance mis madres pero tengo hambre y un dolor de cabeza necesito ser consentido, por favor.

─Mi Bebote hermoso, mira lo que es la vida tus madres chupan y a vos te da la resaca.

─Dale Ma, no me hagas reír, que se me acelera el malestar.

─Tranquilo mi Abejorro. Recostate en el sillón que te voy a buscar un analgésico y a ponerte compresas de agua fría, Jaz te hará de comer. ¿Decime tu hermana todavía duerme?

─No se estaba terminando de duchar. ¿Hoy nos quedamos aquí, Mama Jaz?

─Si Gero nos quedamos, mañana a mediodía regresamos.

─¿Y cuál es su respuesta a nuestra propuesta?

─Hola Mi Abejorrita ¿Descansaste?

─Si lo hice Ma. No me han contestado.

─Jazmin dejo sobre la mesa de luz nuestra respuesta. Subí a buscarla.

─Que tarados que somos Nair ninguno de los dos la vimos.

─Creo que es porque seguimos con el sueño atrasado. Ya vengo iré por ella

─¡Pichi! ¿Podes venir por fa?

─Voy, tomate esto Bebe ya traigo la toalla con agua fría eso te aliviara.

─Flor ahora no puedo explicarte pero necesito que me sigas la corriente

─¡Ay Jazmin que misteriosa! Dale.

─¡Un unísono sí es la respuesta Colorado! Gritando baje corriendo las escaleras y llegue hasta mi hermano, párate boludo necesito un abrazo grupal urgente.

A pesar de mi malestar no podía perderme ese abrazo, me emociono un montón el saber que nuestras madres nos contarían su historia, bueno esa que todavía no conocemos con detalles porque muchas anécdotas ya las sabemos. No sé si soy un pibe extraño pero para mí es tan importante una historia detrás de una foto como una historia contada o escrita por sus protagonistas.

Cenamos todos echados en el living, mi euforia y mi emoción me hacían enredarme con mis propias palabras, en más de una ocasión solté unas cuantas puteadas que bien supo Mamá Jaz escuchar sin decirme nada, sólo me miraba advirtiéndome que estaba por pasar sus límites así que trataba por momentos de tranquilizarme.

─Y bien mis Bebotes ¿Tienen alguna idea para sugerirnos?

─Posta que ya mis neuronas necesitan resetearse, mi estrés bajo pero no tanto.

─Pobre de mí Abejorro, el prepararnos esta sorpresa te aniquilo.

─Yo si tengo algo que decir ─ todos los Estrellas del Rio esperaban expectante mi exposición. Creo en principio deberían unir sus esfuerzos por recordar.

─¿Vos nos estas llamando viejas Bebota?

─No Ma Jaz, no me malentiendas, me refiero a que dos cabezas piensan más que una.

─Cabezas pensantes del orto, perdón, lo siento. Gracias hija por aclararlo.

─Ya va, pero yo quiero saber todo de mis madres.

─Tranquilo Bebote, sabrán lo se pueda contar.

─Estoy de acuerdo. A mí particularmente me gusta más escribir porque así tenes tiempo para ordenar lo que queres decir.

─Buena esa Pichi, el problema es que debemos organizarnos para empezar a hacerlo.

─¡Ah...! Vos lo decís por nuestros compromisos con el trabajo.

─Por eso y otras cosas, la mire con picardía.

─Tengo otra alternativa ¿Qué tal si utilizan sus celulares como grabador de audio?

─¡Está bárbaro Colorado! Excelente idea. Hay algunas apps que transcriben el audio facilitándoles más las cosas.

─Ya viste Pichi, nuestros hijos están muy entusiasmados no podemos defraudarlos

─No lo haría nunca. Debemos ponernos de acuerdo, aunque en principio podemos contar lo que paso en nuestras vidas antes de conocernos por separado o en paralelo eso no lo sé todavía y ya luego nuestra historia.

─Ok. Eso me gusta. Soloquiero acotar 2 cosas: la primera ustedes dos Bebotes serán los editores-asesores,la segunda acotación que haré es un favor especial para todos, en la medida en que nuestrosdeberes y obligaciones lo permitan iremos avanzando sin presionarnos, la intención es dejar que todofluya en perfecta armonía. ¿Todos de acuerdo? ─ Un unísono sí se escuchó en elliving.    


¡Hola! Mil Gracias por seguir allí, acompañando está nueva historia. Me encantan estos hermanos Estrella del Rio. Espero disfruten cada capítulo. Un abrazo desde la distancia. Cuídense que somos pocos.

Nuestra Historia (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora