AULLIDO DE AMOR

¿IZANAMI SAMA UNA SALVACIÓN?

Shiori había llevado la información solicitada por su amo, el hijo del pecado había sido encontrado en una manada de hombres lobo, donde era la pareja del futuro alfa de la manada.

La luna y el sol trataron de pasarse de listos con él, pensaron que jamás se daría cuenta, pero estaban muy equivocados si creían que su acto se quedaría sin castigo, les daría donde mas le dolía a esos dos y ese era su hijo, del cual ya estaba preparando su castigo, uno que sin duda alguna dejaría a todos desconsolados. Sus opciones eran múltiples, la primera enviarlo a servir a algún Dios, la segunda convertirlo en un kitsune, unirlo con el bosque y la tercera era matarlo y punto final.

Se cambio de ropa rápidamente y bajo hasta las tierras de esa manada, no quería que pasara ni un minuto mas, quería castigar a esos dos y la mejor manera era la muerte de Zero; quería que aprendan a no desobedecer sus órdenes nunca mas, así que decidió aparecer delante de toda esa familia que estaba reunida, apareciendo justo detrás de Zero, que se volteó muy asustado al sentir las manos de un extraño sobre sus hombros. Lo que causó gran alegría en Izanagi, al ver en aquellos ojitos color amatista miedo.

Sonrió muy discretamente pero cuando sintió el miedo de Zero, una carcajada inundó toda la sala de la casa de Kaname, que muy pronto murió cuando empezó a hablar.

- veo que los traviesos de la luna y el sol tuvieron un hijo, pero que niños estos - se agarró la cabeza fingiendo molestia

- ¿quien eres tu? - pregunto Kaname muy molesto, por la cercanía que tenia con su Zero ese extraño

- pero que descortez soy, no me eh presentado aún - fingió pena mientras adoptaba una postura mas sería - mi nombre es Izanagi, soy un dios y como tal vengo a este lugar por un motivo muy especial - dijo con diversión

- ¿Cuáles son tus motivos? - pregunto Haruka intrigado y molesto

- bueno en primer lugar ustedes deberían tenerme mas respeto y lo otro es un asunto privado con Zero y sus padres - hablo divertido mientras veía miedo en los ojos de Zero

- Izanagi sama, ¿Como nos encontró? - hablo preocupado Zero

- pues la verdad es que te delataron Zero querido, le dijeron a mi sirviente que vives aquí, se ve que te odian - empezó a caminar tranquilamente por la sala - además tu no deberías existir lo sabes verdad, eres el hijo del pecado - sonrió burlón

- ya callese, usted no puede decirle eso a Zero - hablo molesto Kaname

- yo digo lo que quiera muchacho, soy un dios y ustedes me deben respetar - levantó la voz un poquito e hizo a todos caer al suelo sujetando su garganta - ven lo que pasa cuando me molesto, es mejor que ya no me interrumpan - movió su mano y todos dejaron de hablar - así esta mejor - sonrió mientras empezaba a caminar en dirección a Zero

Habían llegado hasta la mansión de Izanagi sama, encontrándose con la diosa, Izanami sama, a la cual le pidieron su ayuda, ella aceptó gustosa aquella petición, pero al darse cuenta que Izanagi ya no se encontraba en la mansión, entraron en estado de alerta; desesperados bajaron hasta la manada de lobos, donde confirmaron sus sospechas. Izanagi se encontraba en la casa de Kaname, tenía a Zero sujetado de los hombros, mientras murmuraba palabras sin sentido para los otros, pero muy devastadoras para la luna y el sol.

La intervención oportuna de Izanami sama logró romper la maldición que estaba imponiendo Izanagi sama sobre Zero, que muy sorprendido se acercó hasta su esposa.

- ¿Como llegaste aquí? Estoy mas que seguro que cubri mi rastro - hablo sorprendido y molesto

- vaya esposo que tengo, venir hasta aquí solo por que ellos dos te desobedecieron, eres un tonto Izanagi - se acercó hasta el joven y lo libero la las manos de su esposo