carta 3

499 11 0
                                    

A la señora Saville, Inglaterra

7 de julio de 17...

Mi querida hermana:

Te escribo con premura unas líneas para decirte que estoy bien y que mi viaje está muy avanzado. Te llegará esta carta por un buque mercante que regresa a casa desde Ankángel; es más afortunado que yo, que puede que no vea mi patria en muchos años. Sin embargo, estoy ani- mado; mis hombres son valerosos y parecen tener una firme voluntad. No les desaniman ni siquiera las capas de hielo que constantemente flotan a nuestro lado, presagio de los peligros que alberga la región hacia la cual nos dirigimos. Ya hemos alcanzado una latitud muy alta, pero estamos en pleno verano, y, aunque la temperatura es menos alta que en Inglaterra, los vientos del sur, que nos empujan veloz- mente hacia las costas que ansío ver, traen consigo un alen- tador grado de calor que no había esperado.

Hasta el momento no nos ha acaecido ningún incidente que merezca la pena contar. Un par de ventiscas fuertes y la ruptura de un mástil son accidentes que navegantes ave- zados apenas si recordarían. Yo me encontraré satisfecho si nada peor nos acontece durante el viaje.

Adiós, querida Margaret. Estáte tranquila, pues tanto por mi bien como por el tuyo no afrontaré peligros innece- sariamente. Permaneceré sereno, perseverante y prudente.

Mis saludos a mis amigos ingleses. Tuyo afectísimo,

Robert Walton

Frankenstein- Mary Shelley (completa )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora