Capitulo VII: Descenso al infierno.

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La mañana se había consumido, el sol ya daba sus más fuertes avistamientos de las horas de la tarde y los pájaros mañaneros habían cesado su canto.

El auto bus seguía estacionado, las órdenes habían llegado claras a los oídos de todo el equipo.
No podían moverse hasta que se supiera algo del sargento Phoenix o... Hasta que dejará de saberse de él.

Crist seguía en el pequeño acantilado. Pensando en todo. Su mejor amigo se encontraba en una travesía peligrosa, trató de no preocuparse pues ya había estado en esas situaciones muchas veces, pero está en especial le preocupaba.
Hace mucho tiempo que él se había que convencido de que Jake ya no sentía miedo de nada. Su rostro inexpresivo y sus miradas frías hacían que su teoría fuera más acertada; de hecho, no recordaba la última vez que lo había visto sonreír.
Aún así, sabía que en medio de todo él seguía peleando consigo mismo, temía por lo que pudiera hacer.
Sabía que el berserker estaba suelto y que podía haberlos seguido, pero le asustaba más el hecho de que Jake en medio de su ira perdiera la batalla en caso de encontrarse con él.
Jake era un soldado excelente, con un talento indiscutible... Pero... Crist temía lo peor, que su odio y su rencor lo llevará a cometer errores que nunca se perdonaría.

Se mantuvo por mucho tiempo en aquel acantilado, sin apartar por ningún momento el radio de comunicación de si, pendiente a recibir noticias de Jake.
Sintió una presencia detrás suyo, se dio vuelta y sus ojos se sorprendieron al ver a Camila.

- Crist, necesito hablar.
Crist de inmediato, supo a donde quería llegar.
- Te escucho mujer.
Camila se sentía apenada, pues la manera de responder de Crist la hizo sentir como una molestia.
Sin embargo, sacó fuerzas y lo miro a los ojos.
- Tengo que preguntarte... Es sobre Jake.
- ¿Que con él?
- ¿Esta vivo?
- Ya te dije que no lo sé.
- No te creo Crist. No me puedes decir así como así, que no sabes nada de él.
Yo sé que era inseparables.
- Cuando la secundaria acabo, no supe nada de él.
Se mudó lejos con su padre y perdí el contacto.
Camila no pudo evitar agachar su rostro y soltar un sollozo.
- Crist... Solo te pido que si sabes algo, por favor no me niegues el derecho a saberlo. Ahora que volviste, siento como si él estuviera cerca, siento como si lo tuviera frente a mis narices... Por favor, estoy sufriendo... Quiero al menos decirle que lo siento.
Camila le miró con tristeza y antes de derramar la primera lágrima se dio vuelta y se marchó, sin Crist poder siquiera responder.

El camino no había sido muy tortuoso, más bien un poco escalofriante.
Los árboles siniestros en la carretera le daban la bienvenida a lo que parecía el pueblo que había visto hace un par de horas.
Jake trato de usar su comunicador, pero lo único que lo recibió fue la estática de la radio.

Finalmente llegó.
Jake empezó a ver las casas abandonadas, los pequeños parques abandonados, llenos de maleza a causa del tiempo y como un ciclo natural.
Se detuvo frente a una pequeño aviso. Que le recordó lo que había padecido ese pequeño poblado.

"La tragedia de Armero fue un desastre natural producto de la erupción del volcán Nevado del Ruiz el miércoles 13 de noviembre de 1985, afectando a los departamentos de Caldas y Tolima, Colombia.
Luego de la gran tragedia, este pequeño poblado desapareció, pero aún así, el gobierno nacional declaró que Armero sería convertido en tierra santa".

Jake tragó saliva, recordó todo.
Había pasado mucho tiempo desde aquella tragedia, pero sin embargo esa zona era muy misteriosa.
Nunca habían podido entrar a analizar el área pues algo hacia que los aparatos electrónicos dejarán de funcionar y hacia imposible un escaneo.
Ni la más alta tecnología había podido con Armero.

Jake temía lo peor.
Era muy obvio que la zona estuviera infectada también. Pero... ¿Que tipo de criaturas podría encontrar?
Era muy seguro que el berserker solo era el principio de las distintas mutaciones que el virus podría tener.

Virus V. Sanando El Pasado. *Primera Parte Ya Completada*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora