Un Hombre Bonito

¿Toda la semana?

Pov. Derek

Después de que Stiles terminara sus servicios, lo llevé al cuarto de baño. Necesitabamos limpiarnos. Dejé que se aseará y le señale donde se encontraban las toallas y batas de baño.

Espere a que saliera para tomar mi ducha. Al momento que vi que salía de la ducha pude ver con exactitud como era su cuerpo, que tan alto, algunos de sus lunares, la palidez de su piel y el color real de su pelo.

Afortunadamente, estaba tan ensemismado en ponerse la bata y sevarse el pelo que no notó mi presencia. Me moví antes de que empesara a notarlo.

Me dirijí al minibar y alsando la voz le dije que me esperara en la cama.

No sabía que era lo que iba a hacer ahora. Nada de lo que pasó lo tenía planeado. Me olvidé de la ducha, lo único que quería era relajarme.

Empece a checar papeles de mi trabajo y a pensar sobre la nueva empresa que compraría y luego vendería. Tendría que hacer una cita para reunirme con el dueño y por lo que veía en los reportes, támbien a él nieta del dueño.

Seguian seguros que no perderían la empresa.

No me había fijado en la hora, eran casi las 3:00 a.m.. Tenía que dormirme. Hasta que recorde que le había pagado al chico por toda la noche. Y me pregunté si aún estaría despierto.

Fui a la recamará, y lo encontré dormido.

Se veía tan pacifíco e inocente. Parecía un simple joven que descansaba de un día de ayudar a todo el mundo, de proteger a aquellos que no podrían defenderse asimismos, de resolver el mundo.

Me encamine al baño a tomar mi ducha tenía que descansar.

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Me desperté en el sofá, eran las 6:00 y tenía que empezar con mi rutina.

Me volví a bañar y me percaté que aún dormia Stiles. Así que pedí el desayuno para dos personas con algunas cosas extras ya que no sabía que le gustaba.

Marqué a la oficina para checar la agenda y progamar mi cita con los Argent. Mientras llegó el servicio a la habitación y dejo el desayuno.

Escuché que alguien caminaba hacia mí, gire y vi a Stiles se veía un poco avergonzado a la par que un poco desorientado.

-Es castaño- dice señalandose el cabello.

-Mucho mejor- le sonrío.

Me devuelve la sonrisa.

-¿Quieres desayunar antes de irte?

-Gracias-respondé y se dirijé al comedor toma un panqué con las manos y se lo lleva a la boca. Se sienta en la mesa.

-Hay sillas alrededor de la mesa-le digo amablemente.

-Lo siento.

-No hay problema.

Me dispongo a desayunar mientras leo el periódico.

- Así que Derek, ¿A qué te dedicas?. No eres abogado, no eres contador. Así que, ¿En qué gastas tu tiempo?. Aparte de acostarte con prostitutos.

-Compro y vendo empresas que estan en quiebra. Y acostarme con prostitutos no es algo en lo que gaste mi dinero de forma recurrente.