Alturas y Pianos

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Pov. Stiles

El camino de el restaurant a el hotel fue en silencio. No sabía que decir no se fue todo aquello fue totalmente incómodo y más agresivo de lo que esperaba.

Se supone era una cena de negocios aburrida y pacifíca, y resulto lo contario. Aunque, bueno yo soy un prostituto y desde anoche no me ha pedido que me acueste con él.

Se supone que mi trabajo es complacerlo y hacerlo felíz con mi cuerpo y habilidades de este. No solo acompañarlo a una tonta cena de la cuál no se si siquiera salío bien.

Pero siendo sinceros no me importa, me importa que el pueda pagarme.

Llegamos al hotel y Derek seguía sin decir palabra. Tomamos el acensor. Llegamos al loft y entramos directo a él. Fue a la recámara y lo seguí.

Mi sorpresa fue que solo se quitó el saco y la corbata y dejó su maletín en una mesilla y se fue por una silla y ponerse en la puerta del balcón.

Lo dejé ahí y me fui a lavarme la cara y quitarme el gel de mi pelo. Al igual que el me empecé a poner cómodo. Me quité la corbata, el saco, los zapatos y calcetines, el pantalón, así hasta dejarme la camisa y unos boxer.

Me puse a ver unas películas de los años 50 o 60.

Iba a la mitad de la tercera película, justo cuando Marilyn Monroe cantaba Every baby need's a da-da-daddy, cuando preste atención a la hora eran las 2:15 de la madrugada y Derek no estaba en cama.

Salí a los balcones y lo encontre en el mismo lugar solo que ahora con un vaso de whisky. Se veía muy apuesto como una fotografía antigua melancólica.

Pero me llamó la atención que pusiera 3/4 de silla dentro del loft y 1/4 fuera, para ver el paisaje.

-¿Por qué no sales afuera?- lo cuestione.

-Estoy afuera- contestó evadiendo la pregunta.

-No te gustan las alturas, ¿Verdad?- le dije sentandomé en el barandal del balcón.

-¿Podrías bajarte de ahí, Stiles?

-¿Por qué si tu me rescatarías?, mira, auxilio, auxilio, ¡auxilio!- le dihe jugando mientras me hacía hacia atrás simulando una caída.

-Está bien, está bien. Le tengo miedo a las alturas. Ahora podrías bajarte de ahí, me pones nervioso.

-Ok, relajate era solo una broma.

-Pues no es gracioso.

-Y, ¿Cómo estuvo la cena?. Por que en realidad no entendi nada. Bueno si, tu la quieres comprar por que ganarías dinero y el no quiere vender por que es su vida. Y él no te agrada haciendo las cosas difíciles.

-En realidad es porque me agrada él. Trabajo mucho para ser lo que es hoy. Pero su empresa ya casi no tiene futuro.

-Ok y ahora si no te gustan las alturas por que escogee el loft.

-Busque un loft en el segundo piso pero no había y es lo mejor- dijo con cierto sarcasmo.

-Escucha, vamos a bañarnos, nos relajamos, tenemos sexo y nos dormimos en un maratón de Batman.

-Batman, ¿Ehh?. Me agrada ve al cuarto, coy en 15 min.

-Ok, te espero.

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Y pasó 15 minutos y pasó 30 minutos y el no vino. Decidí buscarlo no me gusto como lucía enla plática de hace rato.

El botones me dijo que estaba en el bar y fui a buscarlo. Lo encontré tocando el piano. Era una pieza bastante triste pero con mucha fuerza. No tardó en culminarla y los pocos que eran su público le apludieron.

Un Hombre BonitoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora