La Oscuridad Interior: El Resurgir

45. Engaño, dolor y comida extraña.

Ryou: Mierda

Ese fue el primer y único pensamiento que tuvo al ver el lugar en donde se encontraba.

Hola

El lugar en el que se encuentra es en la misma ciudad destruida llena de cadáveres y restos de cuerpos. Y en frente de él se encontraba ese otro yo con el aura oscura en él.

Ryou: ¿Qué quieres? - preguntó molesto y asqueado al volver a ver todos esos cuerpos muertos.

Qué cruel eres, ni siquiera me saludas ¿Qué hice para merecer esto? - decía finjiendo que le dolió la forma en la que le habló limpiándose una lágrima falsa.

Ryou: Hola ¿Qué quieres? - le dijo ahora más molesto que antes.

Después de todo al decir que hizo para merecer ese comportamiento Ryou casi le grita todo lo que hizo y lo peor es que él lo sabía muy bien y fingía ignorancia.

Ya, ya, no me mires así, era una broma kehehe si que no aguantas una broma - habló calmado con una sonrisa que apenas se notaba.

Ryou: ¿Por qué tu risa es tan rara? - le preguntó casi sin cambiar su expresión de enojo.

¿Y yo que voy a saber? Ya te lo dije, yo soy tu, si yo tengo esta risa debe estar relacionado contigo, ahora la pregunta real seria ¿Por qué tienes una entidad tan siniestra dentro tuyo? - le preguntó caminando a su alrededor.

Ryou: Tampoco se que eres, soy solo un humano, esto no es una historia de manga o una novela para que algo como tu exista - le dijo con un gran enojo, después de todo a donde sea que vea hay cuerpos muertos y partes de cuerpos.

Kehehe, no me refería a mi - dijo en un susurro impidiendo que escuche una palabra.

Ryou: Ahora al punto ¿Por qué estoy de nuevo en este lugar? ¿Qué quieres de mi?

Mmmm pues solo quería hablar contigo ya que me aburro demasiado en este lugar - respondió acostándose en el suelo con las extremidades extendidas y los ojos cerrados.

Ryou: ¿Como diablos te puedes aburrir? ¿Por qué no ves lo que hago y me dejas de molestar? - le dijo tratando de hacer que lo deje salir.

No puedo ver lo que haces por mucho tiempo, se podría decir que tengo un límite para eso. Pero eso cambiaría si tu llegas a cambiar - dijo sentado con un brazo entre sus manos.

Ryou: ¿Cambiar? ¿A qué te refieres con eso de cambiar? - le preguntó con una sensación de curiosidad y otra que le exigía querer saber.

Oh, el tiempo terminó, nos veremos en otra ocasión... original - al decir eso último lo dijo de una manera que parecía que no se lo decía a él.

Y cuando quiso decir solo vio que todo se alejaba y se quedaba rodeado de oscuridad, tal situación ya se le hacía común y cuando pestañeó dos veces lo primero que vio era una una luz naranja con rojo y una sensación cálida.

???: ¿Qué tal la siesta?

Se encontraba acostado en el duro suelo de una cueva y cuando se sentó escuchó una voz conocida que cuando giró la cabeza vio a su nuevo compañero de viaje llamado Ren.

Ryou: Algo incomoda - respondió haciéndose tronar el cuello y mover los hombros.

Ren: Creía que estarías acostumbrado a dormir en el suelo - dijo sentándose a un lado de la fogata con pedazos de madera para alimentar el fuego.

Ryou: ¿Qué te hace creer eso?

Ren: Es que escuché de Mefisto que Ryuzaki te estuvo entrenando un año en esa cueva. Sigo preguntándome como sobreviviste a ese lugar - comentó con una pequeña sonrisa divertida.