The Diamond

The day

Después de la partida de Zeldris ,Todo parecía tranquilo de nuevo, la rutina de Meliodas acosando a Elle se había vuelto costumbre, aunque nunca faltaba que ella le diera su buen golpe para que se estuviera quieto, de hecho la chica ya casi se había acostumbrado y ahora tenia un sentido mas agudo, lo veía venir y lo esquivaba mas seguido para frustración del rubio.

El bar estaba mas lleno que de costumbre, así que para buscar hacer oficio, había decidido ayudar a las chicas como camarera. por sus exuberantes curvas era el objetivo de muchas miradas indiscretas y morbosas, incluyendo la del capitán, aunque el lo hacia mas por molestarla y por eso a este ultimo no le daba tanta importancia.

-. aquí tiene -. cuando ella dejo un pedido en una mesa, uno de los clientes bajo la mirada para intentar ver bajo su falda-. ahh señorita ¿podría traerme otra cerveza? -. sonrió casi con la baba cayéndose de su boca cuando ella se dio la vuelta.

-.oh por supuesto!-. sonrió.

Repentinamente el extraño recibió un pique de ojos por parte de Meliodas mientras el se abrazaba la cintura de Elle y bajaba mas su falda, la cual ya de por si le quedaba muy pequeña
.-. AHHH!-. se agarraba los ojos retorciéndose de dolor en el suelo. Elle se quedo sorprendida por esa acción -. ¡¿Meliodas? ¿que estas haciendo?! -.

El resto de los clientes no le dio mucha importancia, estaban muy borrachos y algunos celebraban eventos especiales. -.¡¡se prohíbe mirar bajo la falda de las camareras!! -. señalo un letrero que el había puesto recientemente, donde especificaba que se prohibía mirar bajo la falda de las chicas, y señalo en grandes letras el nombre de su ex niñera.

para luego acunclillarse y poner su cara bajo la falda de Elle -. ¡solo el capitán tiene ese derecho! -.

-.¡¡tu tampoco lo tienes!!-. Elle le dio un golpecito en la cabeza y Meliodas la miro detenidamente analizando que en efecto la falda estaba muy pequeña y la blusa ya mismo reventaba por su gran busto-. jumm como esta ropa es de Elizabeth, ella es mas delgada que tu así que su ropa te queda pequeña.-

Eso hizo que brotara una benita en la frente de la chica, quien indiscutiblemente se sintió algo ofendida, haciendo que lo agarrara de la cara y lo alzara con suma fuerza-. oe oe oe, ¿acaso estas llamándome gorda? ¿quieres morir? -. le sonrió de forma macabra haciendo que este sudara frió.

Pero el negó rotundamente -. ¿gorda? ¡¿de que estas hablando?! tus pechos son enormes, tienes una cintura muy estrecha, caderas anchas, un gran y sexy trasero , y ademas hermosas piernas, simplemente tienes mas curvas que Elizabeth! -. sonrió el con cierto orgullo de ella mientras la abrazaba con su típica mirada de perversión

. -. ¡Ah ya se! te confeccionare un nuevo uniforme!-.

El realmente se sentía atraído por su cuerpo aunque solía decir esas cosas para enojarla adrede, eso no lo podía negar, de hecho la mayoría de los hombres que estaban ahí en el bar lo estaban también.

Esta vez sorprendentemente Elle se sonrojo notablemente, nunca le había visto hablar tan serio sobre sus atributos físicos, se sintió un poco avergonzada mas por que lo hizo frente de todo el mundo. Elizabeth se quedo sorprendida casi en shock, no pudo evitar sentirse profundamente triste, Diane miro con preocupación a su amiga. -. E-Elizabeth-chan....-

Era cada vez mas notorio el interés de Meliodas en ella, aunque todos pensaban en un principio que era solo para molestar y hacer enojar a Elle, había un trasfondo mas profundo.

Podía notarlo en la forma en como brillaban sus ojos cuando la seguían a donde fuera, no recordaba que la mirara de esa forma... la peliplata no pudo seguir mirando mas,bajo la mirada, dejo la bandeja con la que repartía los pedidos y simplemente subió las escaleras para sorpresa del resto. -. ah ¡espera Elizabeth-chan!