No mientas

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Capítulo 10

Ella se sentó también, pero tomando distancia de Luhan. Algo no andaba bien, no tenía esas pesadillas desde hace dos años y para peor, se sentía protegida al lado de Luhan.

—______, ¿te puedo hacer una pregunta? —dijo de pronto el chico.

—Ya la estás haciendo —le respondió ella. Luhan puso los ojos en blanco, pero se calmó. Supuso que eso era un sí.

—¿Cuál era el favor que ibas a pedirme el otro día? —_____ lo miró, como analizando si contarle o no.

—Quería pedirte prestado un suéter para esconder los cortes de mi madre. Pero no fue necesario, ese día ni siquiera la vi, a pesar de que estaba en casa —_____ sonrió falsamente, como si su comentario le hiciera gracia. Luhan tomaba notas mentales, la relación con su madre no era buena y por alguna razón _____ dejó que todo el mundo viera sus cortes, aunque intentó ocultarlos de su mamá.

—Pero, ¿por qué te cortas? No lo puedo entender —insistió _____.

—Ya te lo dije…

—No mientas —le interrumpió él. _____ lo observó detenidamente, Luhan había adquirido un tono autoritario de un momento a otro, eso a _____ le gustó. No quería conversar con alguien demasiado sensible y debilucho, necesitaba hablar con una persona que no se compadeciera de ella y que pensara en frío a la hora de dar consejos, aunque tenía claro que esta nueva faceta de Luhan duraría sólo unos minutos, ya que había comprobado que él no era esa clase de chicos.

—De acuerdo, no te mentiré… —susurró _____—. Sin embargo, el problema está es que no sé por qué tengo que contarte todo —replicó.

—No seas bipolar, _____. Sólo dime que te cortas porque tu amigo lo hacía y ya —le espetó Luhan. Ella quedó helada, ¿cómo sabía sobre eso…?

—¡Lo sabía, no eres más que un… idiota como todos los demás! —le gritó _____.. Luhan reaccionó y se dio cuenta del error que cometió, a pesar de que era demasiado tarde para tragarse las palabras. 

_____ se paró y corrió escaleras arribas, entró a la habitación de Luhan y guardó sus cosas en su mochila. Se quitó la camiseta del que creyó podría ser su amigo y se puso la suya. Después, bajó con la misma velocidad y abrió la puerta para irse ante la mirada asustada del rubio.

—¿Qué haces? No puedes irte, no tienes donde ir —le dijo Luhan, tratando de retenerla y evitar que cometiera una locura.

—Prefiero dormir en la calle —y dando un portazo que azotó el umbral de la puerta, se marchó.

No podía creerlo, pensó que Luhan era diferente. Pero estaba equivocada, era igual a los otros entrometidos de la escuela. Cuando Baekhyun murió, todos se le acercaron con buenas acciones y dispuestos a consolarla, mas era una sucia trampa para saber de primera fuente los motivos por los cuales Baek se suicidó. Pero como _____ no los sabía, la abandonaron de inmediato.

Seguro se habían puesto de acuerdo para ver si tenían suerte esta vez, se organizaron e hicieron que alguien agradable se le acercara para sacar información. No había otra explicación.

“O tal vez se preocupa demasiado por ti” escuchó que le decía esa parte irracional de su cabeza.

La calló pensando en las opciones que ahora le quedaban, caminando sola en la calle a mitad de la noche.

Buscó su celular para ver la hora, pero no lo encontró. Debió dejarlo en la habitación de Luhan, maldijo para sus adentros. Las cosas no iban bien. Nunca iban bien para ella.

Se devolvió hasta su casa y recordó que no llevaba las llaves. Tampoco era una buena idea interrumpir a su madre en lo que estuviera haciendo con su invitado.

Decidió entrar por la ventana de la cocina, se adentró al patio trasero y buscó la que debería ser la ventana entreabierta que su madre siempre dejaba así en caso de emergencias. _____ admitió que al menos su madre había hecho algo bien.

Cuando la encontró, la abrió por completo y trepó hasta entrar. No había olor a velas aromáticas ni a nada raro, pero sí se oía la estridente música de lo que parecía ser unos de los cd de _____. Lo reconoció enseguida, era una canción de Bring me the horizont.

Perpleja, subió las escaleras para saber de que se trataba todo aquello. Su madre tenía prohibido tocar sus cosas y el que sacara uno de sus cd la enfureció. 

Entró sin avisar en el cuarto de su madre, pero no había nadie allí. La música provenía de su habitación y _____ temió lo peor.

Las piernas le temblaron cuando giró el pomo de la puerta, la música era más fuerte allí. De repente, recordó la pesadilla que tuvo: Baekhyun le decía que no mirara y se escuchaban gritos por todas partes. 

Abrió la puerta y se encontró con la más horrible escena que una hija pudiera imaginar. La música eran los gritos, la imagen de Baekhyun colgando del árbol era su madre acostándose con un desconocido en su cuarto. Sintió nauseas, verdaderas nauseas.

Escapó antes de que notaran su presencia, regañándose y diciéndose a si misma que estaba mejor en la casa de Luhan. Pero tampoco podía volver allí, él era un idiota y no valía la pena relacionarse con una persona así.

Salió de la casa y corrió hasta perder la conciencia y dejar que sus pies le guiaran. Quería morir, no podía soportarlo por más tiempo.

Se detuvo cuando el aire le comenzó a faltar y un dolor punzante le atravesó el abdomen, miró a su alrededor, estaba en el parque en el que solía jugar y conversar con Baekhyun

La ciudad estaba llena de recuerdos al igual que esa casa, había pasado toda su vida de aquí para allá junto a Baekhyun Todos le querían, él era adorable, amable, inocente y a la vez responsable, era el hijo perfecto que todo padre añoraba. Por eso, muchos amigos de la familia Baekhyun no supieron cómo consolar a la devastada familia después de su perdida.

____ tampoco supo, ella no había vuelto a colocar un pie en esa casa hasta esa noche, y las cosas resultaron fatídicas.

“Soy un desastre”. Pensó con amargura.

—En realidad, no tanto…

After The StormDonde viven las historias. Descúbrelo ahora