La tarde se nos pasó entre risas y jodas por parte de él. Nos metimos al mar, jugamos mucho tiempo ahí y tengo que admitir que lo disfruté muchísimo. Un par de periodistas nos sacaron fotos también. Alguna gente que nos reconocía nos pedía fotos pero no me molestó en lo absoluto y a Paulo creo que tampoco.
Se habían hecho las ocho de la tarde, yo no tenía ganas de volverme pero tenía que hablar sobre algunas cosas respecto al desfile con Emanuel.
—¿Nos vamos yendo?—le pregunto a Paulo, quien se sentó en la arena a unos pocos metros del mar.
—Esperá un toque—contestó y se giró levemente para mirarme—. Vení, sentate. Un ratito más y nos vamos.
Le hice caso y me senté a unos centímetros de él. Fijé mi mirada en el atardecer que teníamos frente a nosotros y aquello es realmente hermoso.
—Extraño mucho Argentina—comenta, rompiendo el pequeño silencio que se formó y sin dejar de mirar.
—Yo también. Te juro que a veces pienso en volverme, pero no—dije.
—Este es un lugar re lindo, al igual que Turín, pero para mí no hay nada como estar allá. El fernet, el asado, las jodas, mi familia. Extraño demasiado—hace una mueca y nunca estuve más de acuerdo con él.
Y durante unos minutos seguimos hablando sobre un par de cosas, mientras veíamos como el sol se ocultaba por completo.
(...)
—Emanuel va a matarme—comenté y miré la hora en mi teléfono por tercera vez.
21:19.
Lo peor de todo es que todavía ni siquiera habíamos subido al auto, y el trayecto hasta su oficina duraba algo más de media hora.
—Tranquila, esto fue más que nada porque quería estar con vos, pero supongo que también va a ser bueno para lo del contrato, así que no creo que te vaya a decir nada—me respondió.
"Esto fue más que nada porque quería estar con vos"
Creo que casi muero al escuchar eso.
Me olvidé de mencionar que en todo ese tiempo que estuvimos ahí, ninguno de los dos tocó ese tema y yo no pensé mucho que digamos sobre eso. ¿Cómo hacía para olvidarme del contrato tan rápido cuando estaba con Paulo? No lograba entenderlo. Por más que siempre me ponga a intentar responder esa pregunta, creo que no iba a hacerlo.
Nos subimos y finalmente empezó a manejar. Todavía hacía mucho calor, por lo que bajé el vidrio para poder sentir el aire.
Durante el camino conversé un poco con Paulo y de vez en cuando lo miraba, quedando más embobada. Tengo que admitir que fue un gran día junto a él.
🌙🌙🌙
No me gustó mucho pero bue, espero que a ustedes si❤
