Capítulo XVIII. Fase 3: Revolución.

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Serón se quedó quieto, contemplando con asombro la habitación vacía, sonriendo ante una mala broma, pensando en la promesa que Emily hizo con él y que ella no había cumplido, aún cuando su palabra, era el arma más poderosa que tenía a su favor, su honestidad que ahora él sentía comenzaba a desvanecerse junto con la imagen de bondad que siempre cargaba; y cuando tragó saliva, sintió un nudo en la garganta que no le permitió hablar, ni mover su cuerpo. Repitió en su mente cada palabra que Emily dijo, repitió sus acciones, sus gestos, sus formas de expresarse y por primera vez se sintió perdido, Serón no sabía en quién confiar pues Emily era todo lo que tenía en su memoria durante largo tiempo, apenas recordaba lo que era antes de conocerla y volverse su sirviente. Salió de la habitación y dio aviso al director Kamachi, el hombre parecía intrigado por la reacción desesperada de Serón pero contrario a las ganas que tenía de preguntar, simplemente accedió a una búsqueda para dar con el paradero de Emily.

—¿Se te ocurre algún lugar al que pudo ir? —una simple pregunta que debía dar opciones lo trajo de vuelta a la realidad, una simple pregunta que cualquiera pudo contestar él, que la conocía desde hace diez años no pudo ni articular una palabra. Por primera vez se preguntaba tantas cosas sobre ella y caía en la cuenta de que desde que despertó junto a ella en Ciudad Sdian sin poder recordar nada más que su nombre, la había seguido ciegamente sin pensárselo dos veces, aceptando mutuamente la compañía del otro, sin hacer preguntas, sin dar respuestas ni dar protestas a las acciones de alguno.

—P-puede que en BBN, quizá estará buscando a la princesa —titubeó y se mintió, si ella había desaparecido sin decir una sola palabra, o dejar una pista era por que deseaba hacerlo. El director Kamachi sonrió y susurró un par de palabras para sí mismo que Serón alcanzó a escuchar antes de entrar a un link e ir en busca de Emily <<Te pareces al conde Serón de joven, si él estuviera vivo todavía...>> Serón recordó la magia de Emily y apretó sus puños, negó con la cabeza y comenzó a entrelazar historias, haciéndose la pregunta de la verdadera identidad de Emily por primera vez. Ya en el link, Abraham lo alcanzó, se veía de mal humor, caminaba arrastrando los pies y apretando los dientes y puños.

—¡¿Qué?! —preguntó mostrando su afilada dentadura, alzando la vista al mayor, Serón frunció el ceño y devolvió la mirada, ambos castaños cruzando con hostilidad miradas cargadas de un odio injustificado por el otro, como algún tipo de resentimiento que despertaban en el contrario.

—Nada —articuló Serón con la voz ronca, sin dejar de mirar amenazante al menor.

—Agh, ¡Cállate! —gritó exasperado el más bajo, ignorando la presencia del contrario, ambos se cruzaron de brazos y carraspearon apenas se dejaron de ver.

BBN, TV Capital:

Emily estaba frente a frente, sin dejar de sonreír de forma aterradora a los presentes, su carita infantil que demostraba inocencia se había manchado con esa sonrisa soncarrona y esa mirada que los hacía sentir inferiores a todos. Los tres mejores terroristas estaban luchando con todo contra ella y no podían ni siquiera hacer que moviera alguna parte de su cuerpo más que su mano derecha, demostrando así que tan superior y fuerte era.

—Apártense, no van a vencerla de esa forma. Vuelvan a la base —ordenó Emiliano en tono serio y grave, ampliando así la sonrisa de Emily, llevó ambas manos al frente cuando un ataque rápido llegó por su espalda y fue repelido por arena, esa molesta arena que Emiliano controlaba tan bien. Chasqueó la lengua y contuvo cada ataque sin mover un solo dedo—, si de verdad quieres hacerme daño, tendrás que hacerlo mejor que eso —Emily se limitó a reír un poco antes de contestar y mantener alerta a sus llamas.

—No te voy a lastimar, vine aquí como invitada de Ibis. He traído un regalo —dijo en tono infantil y burlón antes de ver la silueta de Ibis detrás de Emiliano, el joven dejó que la arena se disipara en cuanto ella le tocó el hombro. Un link se abrió dentro de la discusión y dejó salir a Serón y Abraham, ambos se pusieron en posición de pelea y esperaron, la mirada que Emily les lanzó a ambos, llena de molestia y repulsión hizo que al menos Serón se sintiera ofendido.

Virtual Life [En edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora