La Doctora de Jackson 2-MJH

Capítulo 11. Nos volvemos a ver.

Después de esa noticia, Michael ha estado un tanto raro y muy al pendiente del teléfono de casa, lo noto nervioso y no se ha ido desde que supo que estaba embarazada, él trata de darme todo y se lo agradezco con cariño.

- Michael iré al baño, ¿si? - lo miro a los ojos.

- Está bien amor, pero si necesitas algo, sólo di mi nombre y ahí estaré - sonríe.

- No es un buen momento para tus chistes cursis y referencias a tus canciones - río.

- Pero al menos te hice reír - me levanto, tengo cinco meses de embarazo, mi vientre ya está un poco abultado, pero aún puedo lidiar con ello.

Salgo del baño y suena el teléfono al lado de la cama. Michael corre a tomarlo y contesta.

- ¿Diga? - segundos de silencio - Ah, Mark... Si, aquí está - tapa la bocina y me mira - Es para ti, cariño - me acerco y tomo la llamada.

- ¿Si? -

- Vanessa, hay dos cosas que tengo que avisarte -

- Dime -

- La primera es que hoy iremos a ver al chico de la clínica - ¿A Marcus?

- ¿Para qué? -

- Le dije que iríamos, ¿recuerdas? Antes de que me sacaras arrastrando de ahí -

- Bien, ¿y lo otro? - mi tono mamón me sale ahora natural con el embarazo, creo que es el peor cambio de humor que me ha dado.

- Ya aparté los boletos para ir a ver a Rose, salimos mañana al amanecer - mi corazón se detuvo por un segundo, pero sólo para tomar fuerza, pues comenzó a latir muy fuerte.

- Está bien, muchas gracias Mark - sonrío.

- Hoy paso por ti a las seis, ¿crees que Michael te deje ir? -

- Tengo que hablar con él - la emoción de lo de Rose se ha bajado considerablemente. Ahora me inunda un poco de preocupación, Michael no debe saber que saldré con alguien más.

- Espero que lo hagas, porque sea lo que sea es tu esposo, nos vemos - cuelga.

Michael me mira. Tengo que decírselo.

- ¿Qué dijo Mark, amor? - me sonríe y se sienta en la cama, le imito.

- Dijo que... - verga, ¿cómo se lo cuento? Sí, también lo mal hablada ha aumentado, suspiro - Hay algo que debo contarte... - lo miro y tomo sus manos él sabe que se vendrá algo grande.

- Te escucho - dice sin ninguna emoción.

- Conocimos a alguien por accidente, y Mark lo invitó a comer... - no me deja terminar.

- ¿Es un chico? - asiento.

- Y pues, Mark quería llevarme a mí también -

- ¿Si? - dice esperando a que termine.

- ¿Te molestaría que fuera a esa cena? - digo con algo de miedo.

- Amor, tranquila, está bien - sonríe. ¿Qué? Esta definitivamente no era la respuesta que esperaba - Está bien que salgas con tu mejor amigo, sólo que ese tipo no se atreva a ponerte una mano encima, porque si no, hago que se la trague ¿okay? -

- Mark me cuidará, además sólo te amo a ti - le doy un beso - sólo soy tuya, mi amor... - le doy otro beso, uno largo y apasionado.

- Te amo, Vanessa - me mira a los ojos.

- También te amo, Michael - sonrío sintiendo mi corazón latir - Ou - digo por sorpresa.

- ¿Qué pasa? - dice alarmado, tomo su mano y la pongo en mi panza.