Vivir o morir. (Rubius) [Editando]

Capítulo 33.

Me puse un gorro verde de lana. Estábamos preparándonos para ir a la Plaza de Los Inicios, la plaza en la que nos anunciaron que este videojuego era de vida o muerte, un vivir o morir constante. Rubius pudo conseguirle algo de ropa a Yui y se la puse, era una falda como tejana, una camiseta larga verde y unas botas marrones.

Rubius- ¿Lista? -asentí y se cargó en la espalda a Yui-. Lleva tu espada por si acaso.

Nos teletransportamos hasta el piso 1, dónde se encontraba esa plaza, la plaza que siempre me traerá malos recuerdos, dónde pensé que moriría, dónde pensé que jamás volvería con mis padres.

Rubius- Haces siglos que no estaba aquí.

Yo- Lo mismo.

Me vinieron millones de imágenes sobre eso pero intenté quitármelas moviendo la cabeza. Empezamos a caminar por las plazas centrales del piso 1. Había poca gente, algo que me resultó raro porque siendo la ciudad central debería de estar llena. 

Yo- Qué poca gente, ¿no?

Rubius- Yo también lo estaba pensando...

Chica- ¡Devuélveme a los niños! –gritó alguien en el interior del callejón, ambos nos miramos.

Narrador.

La chica se encontraba en el callejón, una barrera humana le impedía pasar con los niños que ella cuidaba en aquel pequeño orfanato. Esta barrera humana estaba constituida por integrantes del Frente, por así decirlo, los policías del videojuegos.

Frente- No puede pasar señora, usted nos debe muchas deudas -le dijo aquel hombre a ella.

Chica- ¡Oliver! ¡Adre! ¡Len! ¿Estáis ahí? -intentó mirarles pero los hombres del Frente eran robustos y bastante grandes.

Ella suspiró y el hombre del Frente carcajeó de forma victoriosa. Ella le miró mal, no soportaba que aun siendo un videojuego tuviera que pagar impuestos por no estar en la delantera.

Chica- ¡No os preocupéis por el dinero! Dadles todo lo que tengáis -gritó.

Oliver- ¡Pero no quieren solo eso! -gritó uno de los niños y el hombre del frente volvió a carcajearse.

Frente- Señora, usted nos debe mucho dinero así que también nos tendrá sus armas.

Chica- ¡Esto es injusto! -susurró.

Entonces ____ y Rubius aparecieron dando un salto por encima de la barrera humana.

Narra _____.

Saltamos por encima de aquella barrera humana. Me acerqué sonriendo a los pequeños mientras los del Frente se giraban para mirarnos. Rubius con una mano sostenía el pie de Yui y la otra la tenía a un lado como protegiéndonos. Es tan mono. 

Yo- Poneos todo de nuevo -me agaché para quedarme a su altura y les sonreí.

Niños- Vale -dijeron algo confusos.

Frente- ¿Vais en contra del Frente?

Frente- Señor, esta gente me suena de algo.

Yo- Rubius -llevé mi mano al mango de la espada sacándola-: déjamelos a mí.

Rubius- Hazles sufrir -me eché adelante.

Aquel  hombre del Frente que carcajeaba como diciendo "Una chica con una espada jajá es gracioso". Me temo que tienen que informarse un poco porque soy _____, la mejor espadachina y sublíder de Los Caballeros de la Sangre.

Me acerqué hasta quedar delante de él, me sacaba dos cabezas pero eso no iba a hacerme rendir. Cargué mi espada de poder convirtiéndose en color violeta y se la clavé en el hombro. Este se cayó para detrás dejando a sus compañeros boquiabiertos. Volví a darle y puso su mano en el hombro.