🎨 16 🎨

3K 295 48
                                    

🎨 «Final: De trabajos, jaquecas y playboys» 🎨

El último mes, tal como se acostumbraba en el liceo al acercarse el fin de trimestre, los estudiantes se dedicaron a dar vida a los proyectos que hubieran comenzado durante el mes anterior, tapizando desde los edificios, hasta los jardines del campus con las obras que, al cabo de unos días de exhibición, regresarían a casa con sus dueños o serían donados al muestrario escolar.

Ya que el montaje de sus trabajos no podía ser una tarea sencilla, ni mucho menos ligera, la administración solía extender permisos especiales para eximir a algunos alumnos de cubrir el horario reglamentario o justificar sus ausencias en las jornadas de trabajo para que ocuparan el tiempo en sus proyectos. Pero aunque la oportunidad existió, Luhan no fue uno de ellos.

Según él, no era justo pedir indulgencia después de haber sido tan inconstante en los meses pasados, sin mencionar que el restaurante acababa de perder un par de meseros y que él se ausentara sólo pondría en aprietos a Leeteuk. Ni sus amigos, ni mucho menos su novio, se mostraron de acuerdo, pero ni con todos sus esfuerzos lograron vencer a su terquedad.

Al cabo de unas semanas de arduo trabajo, sin embargo, Luhan al fin pudo respirar aliviado, pues todos sus proyectos habían sido terminados y se encontraban instalados en puntos estratégicos del campus.

Comenzando por la galería virtual – una muestra tridimensional sobre el expresionismo que se encontraba disponible al público en la sala de proyecciones – hasta la exposición grupal, en la que se incluía el cuadro en acuarela que el ciervo y Mark Tuan hubieran pintado y que todos podían apreciar con sólo asomarse a la explanada principal.

Existía también el cómic que con Baekhyun se hubieran encargado de distribuir, aquel cuyo protagonista narraba la historia del arte mediante un viaje animado y, finalmente, el proyecto en equipo que más coraje le había tomado al castaño, pues se trataba del producto que hubiera diseñado sólo después de enamorarse (y discutir hasta el cansancio) de su compañero.

Organizado como una serie de cuadros espejo, cada dibujo aparecía acompañado por un reflejo, utilizando las mismas técnicas, pero diferentes modelos, de modo que al mirar el primero, la imagen del segundo se encargara de completar el panorama. «Se trata de dejar ver las dos caras de la misma moneda» había dicho Sehun y dado que el proyecto había sido idea suya, Luhan no se había negado a complacerlo.

Lo que no significaba que exponerse ellos mismos como protagonistas de una colección enfocada en representar el amor, no hubiera atentado contra la timidez del castaño, quien al principio había visto aquello como «una invasión a la privacidad», hasta que Sehun se encargó de convencerlo de que podían pensar en ello igual que «una cursi locura del chico que te ama más que a nada».

Cediendo a las tonterías de su novio, Luhan puso su mayor esfuerzo en el montaje del proyecto, que terminó por ocupar casi todo el pasillo que les asignaron en el edificio donde tomaban Dibujo al natural. La placa que lo presentaba, rezaba una línea de la última canción que el grupo favorito del chino hubiera lanzado al público: «Eres el único refugio para mi corazón».

Quizás estar enamorado del ciervo pudiera haber afectado su gusto musical, pero incluso si Sehun disfrutaba también de la discografía de INFINITE, la verdad era que la primera mañana que tenían libres para descansar y no pensar en la escuela, una de las cosas que menos deseaba hacer, era comenzar el día escuchando «The eye» en el tono de llamada.

— Si es una tontería, te mataré, lo juro — gruñó Sehun, al responder, la tercera vez que el móvil timbró.

Al otro lado de la línea, demasiado divertido con el mal humor de su mejor amigo, Jongin rio. Se suponía que tras la semana de exhibición todos los proyectos que no fueran a pasar al muestrario del liceo debían ser retirados y devueltos a los hogares de sus dueños, lo que incluía el teatrillo donde ellos habían estado ofreciendo funciones de diez minutos con su mortífera marioneta.

De trabajos, jaquecas y playboys || HunHan ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora