*Capitulo 17 maratón 3/6
Me quede como imbécil enfrente de la tina, a mi cabeza llegaban muchos pensamientos, pero ni por un segundo se me ocurrió ayudar al de la tina. Hasta que me percate de la sangre que rodeaba al tembloroso cuerpo, y de que si no lo ayudaba, mi mejor amigo podría morir desangrado.
-Espera, no te muevas- me agache hasta desatar la tela de entre su boca- no hables- ordene, seguí desatando sus piernas y brazos- ahora no hagas esfuerzo, entendiste?
Puse un brazo debajo de su cuello y otra debajo de su rodilla. Y en esta posición lo saque de la tina. Me alarme al ver las heridas, tenia muchísimas heridas rodeando su cadera, cuello, brazos, piernas… maldita sea parecía que lo había usado como muñeco vudú.
-Lou…
-sshh! Zayn te callas o te juro que te vuelvo a amarrar el hocico.
Camine presuroso hacia la escalera, pase por el cuerpo inmóvil y me apresure hacia la puerta. La maldita manilla no quería abrirse así que respire hondo, y en un segundo intento logre abrir la puerta.
Corrí, se podría decir a tiempo olímpico, hacia el coche, lo abrí y deposite al tembloroso Zayn en los asientos traseros, saque una manta que traía en la cajuela y se la puse encima, el muy animal le había quitado todas las prendas y más encima lo había torturado.
Si lo hubiera visto antes hubiera torturado más al imbécil.
-Espera aquí… -.- bueno me refiero a que no hables, camines ni trates nada, ya vuelvo…
Cerré la puerta, active la alarma y de nuevo entre a la moribunda casa.
Saque papel y pluma y deje escrito:
“El muy imbécil tiene una bodega repleta de animales en la calle ____(**) los tortura y experimenta, y también tortura personas, les dejo el cuerpo, ya que desgraciadamente se lo merecía
Para: Policía o quien lo vea primero.”
Puse el papel en la gran barriga del cadáver, observe al desgraciado por última vez, el color había abandonado el cuerpo y lo había remplazado la sangre escurriente. Oh como hubiera deseado torturarlo más, me puse en cuclillas y saque mi navaja.
-Sabes, eso que hiciste... Estuvo mal, sabes que el es mi mejor amigo? Sabes que es de las pocas personas a las que respeto? Tú y tu maldito vicio de herir gente! Y más a MI gente! Sabes que… espero te pudras en el infierno, y que nunca… NUNCA tengas el perdón de nadie…eres un maldito desgraciado…te torturaría mas pero sabes que, alguien como tú no vale la pena! ¬¬
Clave la navaja en su brazo, y fui recorriéndola hasta formar esa figura, esa firma, ese símbolo… esa pequeña “L”, nunca sospecharían de mí, no de un chico de 17…
-Te deje un lindo tatuaje que presumir en la morgue…disfrútalo imbécil ¬¬
Salí de la casa, cerré la puerta y la deje como la había encontrado, gruñí en mi interior, si yo no hubiera estado aquí el muy imbécil hubiera acabado con Zayn, de eso estoy seguro.
Mientras caminaba al Sostice pensaba, razonaba, que podría hacer con Zayn… el estaba tirado en mi asiento trasero, desangrándose y tal ves ya sabia lo de mi “trabajito”
*Imbécil por obvias razones ya lo sabe…
*Por Dios no ahora…
*Ya relájate, por que me odias tanto?
*Por que soy un tonto que habla consigo mismo ¬¬
*Ok no me hables… acabo que ni quería ¬¬
-Maldita sea Louis…cada vez estas mas loco- lleve mis manos a mi cabeza y así camine al asiento del conductor. Saque la llave, y entre.
El coche se había inundado en el olor de sangre, voltee hacia atrás, Zayn temblaba y se aferraba a la manta, se había puesto en forma fetal, y tiritaban sus dientes. Cada vez con más rapidez, sin contar que sus ojos eran ferozmente apretados, supongo el dolor que estaba pasando era fuerte.
-Tranquilo Zayn- me saque los guantes de látex y los coloque en la guantera- ya vamos a casa…
Apreté el acelerador y el vehículo se puso en movimiento.
Llegue a la calle que conectaba las dos casas, si iba a la izquierda, llegaría a la casa de Zayn, si iba a la derecha, llegaría a mi casa. Estuve en un momento de pánico, donde seria más recomendable, si iba a su casa, tendría que explicarles a sus papas como había encontrado a Zayn, y no estoy en la mejor situación como para decirles. Y si voy a la mía, tal vez encuentre a mi madre dormida… decidido, iremos a la mía.
Tome el rumbo de la derecha, y visualice el gran portón de los Tomlinson, apreté el botón que lo abría, y lentamente las grandes puertas dobles se abrieron.
El Sostice rugió y en 5 segundos ya estaba estacionado en su lugar.
Baje del asiento de conductor, algo estaba extraño… lo presiento.
-Hijo! Por que vas llegando a estas horas de la noche?
-P…p…papa?
-No, Santa Claus e_e
-Pero...que haces aquí? No estabas de viaje, o en la oficina…oh haciendo algo que no fuera aquí?
-Hijo, parece que no me quisieras aquí… paso algo? Porque tan alterado? -trato de acercarse a mi, y por puro instinto me aleje de su toque.
-Eh, no nada… mi mama está aquí… llego unos días atrás… y le ofrecí que se quedara…
-Si es por eso, no te preocupes, en la tarde llame y contesto ella, ya lo sé- metió su mano al portafolio de cuero y saco unos papeles.
-ah
-solo “ah”?- Me entrego los papeles- aquí tienes, lo que me pediste hace tiempo, ahí esta la información…
-Si, gracias… -agarre los papeles y los deje encima del coche- por cierto…Eh, compre un perro
*uy gran excusa! -.-*
-Qué lindo! Y donde esta?
-En la veterinaria… se me ah olvidado ir por el
El se limito a reír, despeinar mi pelo y entrar por la puerta. Campo despejado.
Abrí la puerta donde Zayn estaba, y de nuevo lo cargue, lo traía acunado contra mi pecho, así que no era difícil sentir los temblores que lo invadían.
Entre a la puerta que conducía a la cocina, me cerciore de que ni mi padre ni mi madre estuvieran hay, y así era.
Corrí hacia las escaleras, tratando de no brincar para no causarle más daño. Localice el interruptor, prendí la luz y corrí hacia mi cuarto.
Entrando, casi inmediatamente, deje a Zayn en la cama, fui hacia el baño y agarre un par de gasas, alcohol y uno que otro “utensilio” medico.
Me hinque en la cama, y trate de localizar todos los puntos heridos, encontré varias heridas de navaja, algunas profundas otras superficiales. Pase alcohol en todas, y tapando la boca de mi “paciente” logre que no se escucharan. También encontré piel despellejada, como si fuera gallina. Y en esas coloque gasas y vendas. Por último me fui a las que en verdad se veían feas y profundas. Encontré aproximadamente 12 de esas heridas y las 12 fueron una tortura para el.
-Listo, quedaste como momia…._.
Observe al relajado Malik, ya había cerrado sus ojos y a pesar de que había sufrido tanto, había caído en el sueño. Sonreí, me alegraba que no hubiera pasado a mayores.
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