BLOOD. [Kaisoo] [BDSM-DaddyKink]

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En la mansión de la familia Park, están reunidos los líderes de la mafia que por años han liderado la parte norte de Seúl.
La razón por la que estaban todos reunidos en aquél salón fue que su líder, Park Chanyeol, tenía algo de suma importancia que comunicarles a sus subordinados.
Una vez que todos estaban allí, el Jefe, quien estaba en la cabecera de aquella mesa ovalada, sin ningún tipo de anticipo dijo:

-Voy a retirarme, ya no tengo interés en seguir siendo parte de una organización como esta.-

Sus semejantes se quedaron boquiabiertos ante tan brusca y repentina noticia. Nadie comprendía porqué, o cómo.

-Debes estar bromeando.-
Dijo su mano derecha, Oh Sehun.

-¿Cuándo he bromeado yo, Sehun?- Replico seriamente Chanyeol.

-¿Por qué ahora? No cuestiono su decisión, pero  simplemente no la entendemos.-
Pronuncio Junmyeon con voz dulce.

-No nos digas que te ha dado pena seguir siendo un asesino, Channie.- Decía de modo sarcástico Yifan, mal apodado Kris.

-Nuestro líder no es un debilucho, ¿verdad, jefe?- 
Dijo Jongdae con un tono de positivismo.

-¡Ya basta todos ustedes!-
Habían colmado la paciencia del pelirrojo.

-Yo me enamore de alguien. Por mi bien, y el de esa persona, me alejare de la vida que he llevado hasta ahora. Todos nosotros seguiremos siendo amigos y mantendremos contacto, pero no puedo seguir liderando la mafia.-
Agrego con un tono serio, pero a su vez inseguro.

-Pero... ¿Entonces quién será el jefe?- Dijo Sehun con un real tono de preocupación.

-Luego de mucho pensarlo, lo más justo es dejarle mi lugar a JongIn, después de todo, es mi hermano menor. Es lo que le corresponde.- Argumento Chanyeol mirando al susodicho con aires de superioridad.

JongIn se ahogó con la copa de vino que tomaba, luego de respirar profundamente, se levantó de su asiento, y sin nada de calma dijo:

-¿Yo?... Pero Chanyeol, yo no sé nada de mafia, ni de crímenes, ni asesinatos...-

-Sehun se encargara de enseñarte todo. He realizado los arreglos necesarios, y ahora todos nuestros hombres responderán ante ti.- Interrumpió el mayor.

El rostro de JongIn palideció.
Su corazón latía como loco, su garganta estaba hecha un nudo, y en aquél salón la tensión podía sentirse muy fuertemente.

-Y dinos Chanyeol, ¿quién es la afortunada?-
Pronuncio Junmyeon tratando de calmar las cosas.

-Baekhyun, Byun Baekhyun. Ambos nos partiremos mañana temprano a Tokio. Y no quiero comentarios con respecto a mi vida amorosa.-
Dijo Chanyeol de modo seco.

-¿¡Baek!? ¿¡Nuestro jefe nos abandonara por irse a divertir con uno de los conejos de Kyungsoo?!- Protesto Kris golpeando la mesa con notable rabia.

-Wu Yifan, cuida tus palabras, recuerda que esta es mi casa, y Baekhyun ahora es mi pareja. Merece respeto, al igual que yo.-

-No Chanyeol, esto es inaceptable.- Dijo mientras tomaba sus pertenencias y salía de aquella mansión lleno de irá, y confusión.

El ambiente era intolerable, por su parte, JongIn se había retirado a su habitación. Estaba desecho, su cabeza no dejaba de dar vueltas. Era el jefe ahora, la cabeza de unas de las mafias más peligrosas de Seúl,  ¿Cómo lo haría? A él no le interesaba la violencia, ni la venganza, si lo deseara, podría ser tan cruel como su hermano mayor, pero no quería hacerlo, no quería que las personas lo viesen de esa forma.

Además, JongIn era listo, sabía que la huida de Chanyeol y Baekhyun provocaría toda una guerra entre ambos bandos, pues Kyungsoo no se quedaría de brazos cruzados ante una situación tan delicada, sabía que la irá del líder rival no era algo con lo que se debiese jugar, si Kyungsoo así lo deseara, podría irrumpir en su casa en ese mismo instante, y cortar la garganta de todos allí, tan solo para demostrar su poder.

Se aproximaba una masacre, y como el nuevo líder, debía ser listo, pero, ¿cómo? No sabía qué hacer.
No quería decepcionar a su hermano, ni a ninguno de sus ahora subordinados.
Ante aquella gran frustración, unas lágrimas infantiles comenzaron a recorrer sus mejillas, se sentía confundido y a la vez impotente, era algo de lo que no podría huir.
No  había nacido para ser mafioso, pero en eso tenía que convertirse. Debía llenar una gran sombra, la de Chanyeol, y la de su padre. Ambos grandes mafiosos conocidos por su falta de piedad y empatía hacia la vida humana.

Unos golpes a la puerta de su cuarto lo sacaron de aquellos profundos pensamientos.

-Pase...- Dijo el de tés morena en tono tímido. 

-Soy yo, Sehun, con permiso- Dijo mientras entraba al cuarto.

-¿Necesitas algo? ¿Sucedió algo?- Pronuncio JongIn.

-Mira, sé que puede ser abrumador estar en tu lugar ahora, han puesto una gran carga sobre tus hombros, y es normal que estés aturdido por ello. Pero debes ser fuerte, tus cachorros lo necesitan.-
Sehun intentaba ayudar a su ahora jefe, pero ciertamente en ese momento no había mucho por hacer.

JongIn no estaba preparado en lo más mínimo como para ser un asesino a sangre fría, ni un así llamado "gánster" como lo habían sido los anteriores hombres en su familia.
No podía creerlo, sus planes de vida, su sueños, sus posibilidades, todo le había sido brutalmente arrebatado.
Algunos creerían que lo que ocurrió era un sueño hecho realidad, en ese puesto tendría todo lo que quisiese, armas, putas, y sobre todo, mucho dinero.
Pero no lo era para él, era una completa pesadilla. JongIn era alguien sencillo, no le gustaban los lujos excesivos, aunque como todos, en ciertos casos, los disfrutaba.
No estaba interesado en mujeres, ni en el dinero. Quería un trabajo honesto como cualquiera. Quería ganar dinero de hacer lo que amaba, bailar, y ciertamente lo hacia de maravilla.
Jamás le había contado a nadie sobre su pasión, y mucho menos lo haría ahora. Sabía que sería inútil.
Simplemente se resigno a que ahora esta era su vida, y nada podría cambiarla.

En ese instante se dio cuenta de tres cosas:

La primera, ahora era él era el líder de la mafia más violenta de Seúl.

La segunda, su hermano huiría esa misma noche, y era probable que no lo volviese a ver.

Y la última, debía de asesinar a Kyungsoo como fuera, ya que si no, el haría lo mismo con todas las personas que le importaban en el mundo.

Su vida jamás volvería a ser la misma...

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Muchísimas gracias por leer, ojalá les guste leerlo tanto como me gusta escribirlo<3

Les dejo amorsh, y acepto todo tipo de criticas constructivas. Gracias.