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Adviertencia, Lemmon BDSM.
(El bdsm incluye maltrato verbal y masoquismo sexual consentido)

Habían pasado tres días exactamente. KyungSoo estaba frente a JongIn, ambos mirando al otro con un deseo voraz. Con una expresión ilegible KyungSoo entrego al más alto un contrato ya firmado por él donde establecían desde los limites de la confidencialidad de su relación, hasta los límites y prácticas a las que KyungSoo estaba dispuesto y disfrutaba realizar.

JongIn lo leyó con cautela, al final sonrío con su mirada fija en el pelinegro y firmo aquél papel. KyungSoo suspiro con su cuerpo vibrando por el más alto.
Eran las 01:56 a.m.
Ambos estaban en el estudio de JongIn, el silencio era abrumador, KyungSoo estaba con la vista hacia abajo de pie frente al sofá en el que se encontraba JongIn fumando un cigarro mientras miraba fijamente con hambre al pelinegro.

-Quítate la ropa, te quiero de rodillas, y con la mirada hacia abajo.-

-Sí, señor.-

KyungSoo se encontro quitándose la ropa lentamente, dejando ver la ropa interior que él mismo había preparado para esa noche.
Llevaba puesto un collar negro apretado al cuello (o gargantilla, como le digan), con un pequeño aro de metal que encastraba con una cadena. Su curbilinea figura era acompañada por su hermosa piel lechosa. Trasero y entrepierna eran cubiertos por unas bragas de encaje negras, que ciertamente resaltaban en su tono de piel.
Y por último dejó ver unas medias que iban sobre la rodilla de color negro que terminaban en encaje que hacia juego con las bragas.
JongIn estaba atónito, sus ojos se volvieron vidriosos por el deseo casi aplastante que le invadía ahora.

-Vaya, ¿Quién lo diría? Si ya hasta has venido preparado, pequeño conejito. Aunque ahora te ves como toda una puta.-

La voz de JongIn estaba más grave de lo normal. Se acercó y tomo la cadena unida al collar de KyungSoo y tiro con algo de fuerza, haciendo que él lo mirara.

-Eres toda una puta, y apuesto a que quieres ser tratado y follado como una.-

-Sí...-

KyungSoo sintió una bofetada en su mejilla, jadeo y su entrepierna palpito.

-Sí, ¿qué?, puta.-

-Sí señor, soy una puta.-

JongIn sintió como su entrepierna se apretaba en sus pantalones al ver las pupilas dilatadas del menor y su respiración agitada, la palma de su mano le picaba por azotar ese culo gordo que tenía esa pequeña mierda.
Se sento en el sofá y palmeo su regazo.

-Ven, recuestate en mis piernas sobre tu vientre.-

A KyungSoo le avergonzo la rapidez con la que obedeció la orden del castaño.
JongIn se encontro masajeando y apretando el culo del pelinegro, y sin previo aviso, dio una nalgada cruel en el trasero del más bajo.
El pelinegro soltó un gemido ahogado, que fue música a los oídos de JongIn.

-Oh, te has portado bastante mal, ¿no es así, puta?-

KyungSoo sintió un segundo golpe, luego otro y otro. Su trasero ardía, y su pene goteaba preseminal antes de darse cuenta, mientras estaba siendo nalgueado ferozmente, frotaba su erección en el regazo de JongIn.

-Realmente eres una zorra, ¿a quién crees que le pediste permiso para complacerte?-

JongIn, tomo con firmeza el cuello del pelinegro y lo beso con un hambre desgarrador, metiendo su lengua en la boca del menor. Por su parte, KyungSoo se aferraba al cuello de JongIn mientras era besado. La falta de aire los hizo separarse, JongIn ya no podía resistirse.

-De rodillas.-

KyungSoo obedeció, ya sabía lo que iba a pasar.
Mantenía su mirada baja, y oyó el crujido de la ropa del más alto. Jadeo cuando el mayor tiro de su cadena haciendo que quedara en frente de su endurecido y grueso miembro.
Trago duro.

BLOOD. [Kaisoo] [BDSM-DaddyKink]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora