BLOOD. [Kaisoo] [BDSM-DaddyKink]

🔥7🔥[ChanBaek]

(Este capítulo es más largo debido a que narra como se desarrolló la pareja, disfruten.)

Al rededor de un año antes.

ChanYeol se encontraba en su oficina, planeando su contraataque, o más bien defensa contra KyungSoo, su rival.
Él estaba seguro que el lider contrario querría verlo hecho polvo luego de interferir en uno de los negocios del conejo en jefe.
Era aterrador hasta la mierda el hecho de saber cuán estratégico era KyungSoo para planear sus ataques, y sabia que sus secuaces eran igual de capaces.

Lo que realmente no esperaba ChanYeol era sentir una hoja de metal helada en su cuello a las 03:45 a.m., estiro su mano hacia la lampara en un movimiento suave y bajo la atenta mirada de su agresor encendió la luz.
Lo que vio lo dejó más perplejo aún.
Un par de ojos azul cristalino, casi grises, lo observaban, no llevaba máscara, así que las facciones delicadas y angelicales de este chico se veían perfectamente iluminadas por la pequeña lámpara en la mesa de noche.
ChanYeol se golpeó mentalmente, ¿qué diablos hacía observando la belleza de un posible asesino en su cama?
En un movimiento ágil tomo su arma que se encontraba debajo de la almohada y apuntó al entrecejo del hermoso chico apoyando el arma en el mismo.
El agarre del cuchillo se aflojo levemente.

-¿Quién te envio? O mejor dicho, ¿cómo entraste aquí? Debes ser uno de los conejos de Do, ¿no es así?- dijo ChanYeol con su voz más intimidante.

El joven ni se inmuto.
Le otorgo una sonrisa ególatra al mayor.

-¿Uno de los conejos? Estás en presencia de BaekHyun, mano derecha de Do, deberías ser más cuidadoso con tus ventanas, perro alfa.-soltó con voz aterciopelada el rubio.

-Vivo en un 3er piso, niño.- replicó ChanYeol.

-No he venido ha matarte, perro alfa. Sólo soy un mensajero, no le harías daño al mensajero, ¿verdad?- sonrió de tal manera que ChanYeol no pudo evitar sentir una calidez en su pecho...y otro tipo de calidez más abajo.

El rubio continuó.

-Debes oirme bien, perro alfa, porque Do no otorga segundas oportunidades, deja de interferir en nuestros negocios, o yo mismo vendré de nuevo y arrancare esos lindos ojos grises de atractiva cara, tan lento que vas a suplicar que te mate. Ahora debes dejarme ir, si no llego a casa de Do en 45 minutos todos tus perros y tú estarán muertos en menos de 2 horas.- el rubio se levantó muy seguro de que el pelirrojo no lo detendría. Se volteó por un segundo.

-Deberías agradecerme, si no fuese porque convencí a Do de que me dejara hacerte entrar en razón, ya estarías muerto.- BaekHyun le dio una que sólo podria catalogarse como lasciva.

-Valió la pena venir. Adiós perro alfa.-

Y así como habia llegado se había ido, ChanYeol estaba estupefacto, ¿acaso ese pequeño demente habia coqueteado con él?

Mierda, esa noche no logró dormir nada.

Luego de varios meses, ChanYeol había duplicado la seguridad de su hogar, y había dejado de interferir en los negocios de Do, pero no había logrado quitar al tal BaekHyun de su mente, con suerte esa noche lograria quitarse la mirada del rubio de la mente, al menos por un rato.
Él y su grupo de allegados se dirigían al baile por la boda de uno de los herederos a la mafia japonesas de la zona norte, la cuál organizó esa fiesta en son de paz, invitanto a varios de los lideres de mafias cercanas y sus acompañantes. ChanYeol vestía un traje color gris oscuro, acompañado por una corbata roja, que hacia juego con su cabello, e impecables zapatos negros. Al entrar al gran salón de inmediato reconoció a su más grande rival, Do KyungSoo, que iba acompañado de sus propios allegados, y entre ellos...entre ellos estaba el chico rubio, BaekHyun.
ChanYeol noto cómo aquél traje celeste claro resaltaba su piel de modo delicado, acentuando sus caderas y estrecha cintura, también tenía un maquillaje delicado que resaltaba sus labios y ojos. El muchacho no llevaba camisa bajo el saco, eso hizo que a ChanYeol se le secara la boca. Okey, probablemente era porque no habia tenido sexo en mucho tiempo, y no era su culpa que justo la mano derecha de su enemigo mortal fuese el chico más sexy que hubiera visto en mucho mucho mucho tiempo.