Capítulo 29

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La chica apartó la mirada, no podía mentirle viéndolo a los ojos

Sora: Bueno...

Ruki: Dímelo

Sora: Yo... no puedo

El vampiro se le empezó a acercar, parecía molesto. Pero, era razonable que estuviera así. Sora aceptó sellar sus poderes, vivir en el mundo de los demonios, e incluso despedirse de sus habilidades de pelea. ¿Cuál era la razón de eso? Le enfadaba mucho el hecho de que aceptara rebajarse hasta quedar a algo parecido a una humana. Pero, el mayor motivo de ese comportamiento era la mirada que tenía Sora al entrar al comedor. El brillo de sus hermosos ojos desapareció al escuchar las palabras de "esa persona" esos ojos que tanto lo cautivaban, por ese momento mostraron una profunda tristeza. ¿Qué o quién le había hecho reaccionar de esa manera?

Ruki: Ya no soy un niño para que me sigas ocultando cosas

Al escuchar esto Sora abrió los ojos. El chico que estaba frente a ella era un joven maduro, fuerte e inteligente. ¿Cometió un error al intentar protegerlo? Ruki ya había crecido. Tenía razón, no debía seguir privándolo de los problemas, pero, no quiere lastimarlo por su culpa. Él no tiene idea de la inmensidad del pasado de Sora. Si se enterara de que la dulce y cariñosa chica había hecho eso ¿Sería capaz de perdonarla? Ruki está consciente de que Sora mató a muchas personas, pero no sabe la complejidad de esto. Solamente Karlheinz lo sabe, ni siquiera Carla y Shin están enterados. No quiere pensar en un futuro sin los Mukami, puede haber vivido miles de años, pero seguía siendo una niña egoísta e inmadura, se niega a perderlos, se rehúsa a lastimarlos, sin importar que termine hiriéndose a sí misma, aunque termine dañando a todos a su alrededor. Ellos no deben verse involucrados de ninguna manera. Pero, esos chicos no son tontos. Su curiosidad los hará acorralar a Sora como lo está haciendo Ruki. No quiere mentirle, no quiere decirle la verdad. Simplemente quiere acostarse en su cama y esconderse del mundo entero como lo hacía de pequeña, llorar en los brazos de Christa y ser consolada por ella. Quiere volver a escuchar esa tranquila voz diciéndole que todo estará bien.

Una lágrima se asomó sin permiso por el ojo de Sora. Esta rápidamente evitó romper en llanto. Al darse cuenta de esto, Ruki la envolvió en un abrazo. Jamás la había visto llorar.

Ruki: Lo lamento

Sora: No, es mi culpa

Ruki: Cuando llegues a estar lista me lo dirás. No pienso volver a obligarte.

Sora: Por favor perdóname, Ruki, pero si te lo digo...

Ruki: Esta bien

Esas dos palabras que fueron pronunciadas con tanta serenidad y paciencia la hicieron romper en llanto. Ocultó su rostro en el pecho del chico, quien la refugió posesiva y protectoramente. Poco después notó como la respiración de la chica se tranquilizaba, se estaba quedando dormida.

Ruki: Estas sobre-esforzándote, descansa un rato ¿Si?

Sora: Ruki, se me olvidó decirte algo

Ruki: ¿Qué cosa?

Sora: Karlheinz te dio un cumplido ¿No?

Ruki: Si

Sora: Estoy muy orgullosa de ti –se queda dormida-

Ruki abrió los ojos con sorpresa mientras ocultaba su sonrojo con la manga del suéter.

Ruki: Eso fue un ataque sorpresa Sora. La próxima vez yo seré quien te haga sonrojar.

Le dio un delicado beso en la frente y se sentó correctamente en la cama, rato después llegaron los demás. La atendieron hasta que el sueño les ganó y se acostaron al lado de Sora.

La cuidadora de los Mukami [Diabolik Lovers]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora