Se lo dijo Mila.
—Joven Payne, el joven Malik está abajo.
—Gracias, Mila. Iré enseguida.
Mila cerró la puerta. Se alejó pasillo abajo moviendo la cabeza dubitativa.
De un tiempo a aquella parte, el joven Payne parecía siempre pensativo y lejano. Claro nunca fue muy comunicativo. Algo reservado, silencioso, más bien introvertido.
Hacia más de veinte años que trabajaba en casa de los Payne. Entró en aquella mansión contando veinte años. No se casó y fue la niñera del niño, cuando esté nació, paso más tarde a ser su nana. Liam contaba veinte años. Es decir, los cumplía un mes después. Por el se consideraba en la casa de los Payne como un miembro más de la familia.En el vestíbulo, cuando se dirigía al cuarto de plancha, se encontró con la señora.
—¿Le has dicho a mi hijo que su prometido lo espera, Mila?
—Sí, señora Payne.
—Esta bien, muchas gracias.
Mila desapareció y Karen Payne se dirigió a la sala donde esperaba Zayn Malik.
—Vendrá enseguida, querido. ¿Gustas algo de tomar? Hace bastante tiempo que no veo a tu madre—añadió sin transición—. ¿Cómo se encuentra? Desde que salieron de viaje para ir a visitar a tus abuelos, apenas si nos vemos.
—Mamá alterna un poco.
—Tu madre siempre tuvo la manía de encerrarse en casa—sonrió Karen gentilmente — . Dile que un día de estos iré a visitarla.
—Le aseguró que estará encantada de recibirla, Karen. Con su jardín, macetas y sus libros es en lo único en lo que se distrae. Creo que le haría falta una persona que la sacará un poco de aquel lugar, estoy seguro que usted sería la persona ideal para lograrlo.
—Lo intentaré. Tu madre es joven. Debería hacer una vida más en consecuencia con su edad. Cierto que quedó viuda muy joven y que nunca pensó en casarse nuevamente, pero tú eres ya un hombre no la necesitas mucho y, sin embargo continúa con su mundo solitario— Sin transición, sin que Zayn la interrumpiera ni le contestará, añadió obsequiosa—¿No Tomás nada? ¿Un whisky?
—No, gracias. Liam y yo saldremos a pasear en auto.
—¿Hace mucho que dejaste la empresa?
—A la hora de siempre.
—Es que Geoff no a llegado aún.
Zayn miró la hora en su celular.
Zayn era un muchacho alto y delgado, de porte muy distinguido, Karen le calculaba unos veintiuno, cabello negro oscuro, ojos color miel, la expresión grave. Al verlo así podría decirse que contaba con más edad.
—Llegaron unos alemanes a la empresa— Zayn dijo con una tibia sonrisa—. Parece ser que piensan renovar el contrato. Es posible que se retrase, oí comentar en la oficina que se convoca una reunión extraordinaria.
—Pero tú estás aquí.
—Yo tengo la junta mañana con los demás ingenieros y los señores alemanes.
—Ya entiendo.
Se oyeron pasos—. Ya te dejo—Murmuró Karen—. Ahí viene Liam.
Liam entro en la sala, vestido casual a diferencia de Zayn quien portaba aún el traje. Liam era alto, ojos cafés, cabello castaño, llevaba un chamarra de cuero café.
Hacía frío. Estaba en el mes de noviembre.
—Listo, Zayn—Liam al ver a su madre, añadió suavemente—. Hola mamá, siento haberme tardado.
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No sufras por mi dolor »Ziam«
ФанфикEsta historia es una adaptación de una mini-novela de 1969 que leí y me gustó, lleva el mismo nombre. Todo los derechos a su escritora: Corin Tellado.