La historia de la relación entre Sarada y Boruto. Ella no acepta sus sentimientos y él directamente ni está consciente de ellos.
-En constante arreglo de errores ortográficos.
-Se agradecen las correcciones de errores ortográficos y sugerencias so...
Los tres protectores de Konohagakure y Moegi se encontraban en la azotea del edificio hokage observando el desastre...
-De tal palo tal astilla eh- reía el Nara
-No puedo creer lo que hizo este niño
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El rostro del Nanadaime hokage decía "viejo tonto".
-Yo creo que es una representación más fiel de tí, dobe.
-¡cállate teme!
Situación acompañada por una modesta risa de Moegi.
-Me voy.
-Buena suerte. Sasuke- con la pequeña sonrisa con la que solía despedir a su amigo...
Después de despedirse de su padre decidió ir a la biblioteca. Que él no esté en la aldea realmente le afectaba, hasta incluso había dormido mal. Por lo que decidió hacer uno de sus pasatiempos: leer.
-Hola, quisiera utilizar estos libros.
-Por su puesto, señorita ¿aquí? o ¿para llevar?
-Aquí por favor.
-De acuerdo. Todos tuyos
-Gracias.
Subió las escaleras. Le gustaba leer en el segundo piso.
Escogió una mesa ubicada junto a una ventana. Apreciaba mucho la lectura acompañada de una pacífica vista de la aldea y al árbol de cerezos ubicado junto a la biblioteca.
Delicadamente corrió la silla, se sentó y apoyó los libros.
Escogió dos libros de las temáticas que más le gustaban: la historia shinobi y el misterio.
Abrió el de misterio primero. Leyó un capítulo entero sobre supuestos pergaminos secretos, creados hace muchísimos años, en la época del RikudouSannin por sus discípulos o gente que ya tenía conocimiento sobre el Ninshū.
No eran más que locas leyendas. Quizá sean verdad o quizá no. El universo está completamente lleno de secretos y cosas desconocidas.
Tomó un leve suspiro y se levantó para ir al baño.
En su regreso optó por cambiar de lectura. Ahora tocaba historia.
Una persona tan ordenada y al pie de la letra como Sarada optaría por leer los capítulos en el orden que van.
Eso mismo intentó hacer. Pero al abrir el libro por la mitad, se encontró con que el título de uno de los capítulos le parecía realmente emocionante a primera vista.
Por un momento eso no le gustó, pero su meta en la vida estaba levemente ligada con el nombre que residía en tomo IV de Historia Shinobi.
