Summer in Tennesse «l.s»

Capítulo 13

Hola, hola. Dejé un pequeñito aviso en el "tablero de mensajes" GRACIAS POR EL 1.4k de visualiz. A veces me entristece, pero otras me llena de esperanza. Abrazos.

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Capítulo Trece

"Dejar de llorar"

—No voy a desistir de esto, te guste o no. –Fue lo que Harry le susurro con hombría y franqueza a Louis, quién solo parecía embriagado por todo lo que estaba sucediendo entre ellos—

—N-no... Harry... –articuló el ojiazul, al sentir como los besos se volvían cada vez más insostenibles—

—Sí, mil veces si... –Contestó el ruloso, mientras sus labios se despegaban de la boca exquisita de Louis para descender— Te deseo... tanto... –Sin más con sus fuertes manos abrió la camisa que portaba el ojiazul, dejándole a la vista el torso broceado, Harry le barrió con la mirada. Louis solo podía temblar ante la fría y calculadora mirada llena de lujuria de su amante—

—Vas a violarme... –demandó Louis, con voz casi inaudible—

—Claro que no... –Pronunció Harry para apegarse más al cuerpo de su primo dejándole sin escapatoria— Porque también lo quieres, se que lo quieres... no te resistas más... –susurro en el oído del más bajo— por favor... déjame demostrarte lo que necesitas... –su mano derecha bajó hasta el cierre de los jeans de Louis sintiéndole vibrar agresivamente— Tu piel me necesita, yo te necesito... olvídate de todo...por favor –incitaba Harry, mientras sus labios absorbían la manzana de Adán de Louis quién no evito soltar un gemido—

—S-si... —gimió Louis— Ah, s-sí.

—Voy a hacerte muy feliz... –prometía el ojiverde, mientras sus labios descendían desde la garganta de Louis, hasta el estomago.

El ojiazul solo miraba, las llamas barrían su cuerpo sin siquiera poder controlar la situación, cualquiera podría salir de la sede y verlos a ellos en esa actitud poco normal, bastante poco normal, cabe decir, pero eso solo generaba más y más excitación entre ambos individuos.

—Que maravilloso hueles... te imagine tantas veces... –susurraba Harry, dejando los rastros de su saliva sobre el estomago del ojiazul. Louis solo podía cerrar sus ojos, sentir aquellos labios húmedos arrastrarse por todo su cuerpo, nunca jamás deseo tanto algo en su vida, algo independientemente si fuera prohibido el lo quería, lo quería ahora— Dios, no sabes cómo me tienes... –Sin más Harry quedo arrodillado delante de su primo, estaba en la decisión si era el momento o la circunstancia apta, sus ojos ya negros de pasión se movieron el dirección a los de Louis, quién le miraba con determinación, suplico, sus labios estaban hinchados producto de tanto besarse y su estomago lucía brillante por el camino de besos que le había dejado allí— Voy a chuparte la polla... ¿te gustaría? –preguntó indefenso o tal vez fingiendo inocencia.

Louis le miró duro, le miró casi con ira, le sostuvo la cabeza y enredo sus dedos en esa cabellera indomable y apuntó el rostro de su familiar en dirección a su miembro erecto que solo le cubría el bóxer. —Me estas volviendo loco... –logró decir el ojiazul— Hazlo todo... ahora.

Harry se sintió con la petición que siempre deseó haber escuchado, así que con sus fuertes y grandes manos deslizó aquel bóxer encontrándose con ese miembro pidiendo a gritos ser tratado. Louis soltó un gran suspiro al sentir como la nariz de Harry se oprimía en su pelvis... le estaba enloqueciendo y lo sabía perfectamente.