Capítulo 22

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Holaaaaaaaaaaa. GRACIAS DE NUEVO POR LOS 8K!!!!!!!!!!! OS AMO. NUEVO CAPÍTULO, MUY VELOZ, ABAJO PREGUNTAAAAA + PREMIO. 

No olviden dejar su voto, pasar el dato, significa toooodo el motor para avanzar en esto, les quiero mucho. Siempre, familia Androide


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Capítulo veintidós

"Al fin te encontré"

"Pero al fin te encontré o me encontraste tú, o quizás fue el amor que al final se apiado, pero al fin te encontré te vi y no dude sé que me he equivocado jurar amor en el pasado, porque solo a  ti te amo" Camila Silva.



¿Papá?, me dirás que es lo que está pasando ¿verdad? –preguntaba, el pequeño niño de ojos verdes.

No hacían más de unas horas que habían llegado a Tennesse y Robert había luchado por contener sus lágrimas. Harry no era despistado sin embargo, sabía que algo malo estaba sucediendo y ver a su padre desempacar unas cajas en lo que sería su nueva habitación sumado a lágrimas por las mejillas del mayor fue la prueba evidente de que algo andaba definitivamente mal.

¡Dime! –exigía el menor. Robert se secó sus ojos y miró a su pequeño. Harry era un nene, un crío, no necesitaba saber esto— ¡Dime ahora papá! –gritoneó. Robert asintió regalándole una sonrisa tranquilizadora a su amado hijo, se sentó en la única cama que había hasta la hora en ese cuarto y le indicó a Harry que se sentara a su lado—

Estas muy nene para comprender esto Harold, pero te voy decir, porque sé que en un futuro vais a recordar cada una de estas palabras. –articulaba el mayor mientras miraba el rostro intrigado del menor. Harry era su copia, mata de rulos, ojos verdes y rostro blanco— Las personas nacen para vivir y vivir es un reto que hay que afrontar día a día, vais a desilusionarte montón de veces, vais a llorar montón de veces, vais a sentirte pleno montón de veces, vais a sentirte feliz montón de veces y vais a amar una sola vez en la vida y eso es uno de los retos de "la vida" porque cuando te desilusionas de esa única cosa que no se repite, lloras hasta el hígado –contaba Robert y Harry solo podía pestañar; probablemente no entendía del todo, pero sabía que su padre estaba diciéndole un montón de verdades—

¿Tú y mamá no se repetirán, verdad? –se atrevió a preguntar el menor con una voz difícil. Robert le quería decir que su madre le amaba pese a todo, pero eso sería algo ficticio—

Mamá te tuvo en la panza nueve meses Harry –decía Robert mientras acariciaba los pequeños rulos de su hijo pequeño— Y luego te ayudó a ponerte el cinturón cuando fuiste a la sala cuna, eres algo de ella y nunca te olvidará –Harry miró a su padre, parecía sentirse conforme con esa vaga respuesta— Y tampoco me olvidará a mí, porque yo tampoco la olvidaré, le amo como siempre lo hice. –suspiró—

¿Cómo sabes si amas? –preguntó curioso a lo que Robert sonrió—

Y bueno, lo sabes porque... cuando se ama, cuando miras a la persona, sientes... una electricidad avasalladora que atraviesa tu ser, es como... un corazón en llamas, tu cuerpo se estremece del solo hecho de escuchar su voz y lo único que deseas hacer cuando le ves, es tocarle, olerle... quedarte todos los días de la vida... pegado a esa persona especial. –explicaba— Y cuando sientes eso, bueno solo queda resignarse a estar colado –sonrió—

Summer in Tennesse  «l.s»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora