Poco a poco superaba este sentimiento de dormir y no despertar. Iba al psicólogo cada 20 días y también conversaba con una profesora que me ayudaba a sentirme mejor... Parecía que terminaría este episodio de mi vida, pero siempre hay que esperar lo inesperado... Mientras más me alejaba de las personas (como las de mi salón) curiosamente ellas se acercaban más a mi, obviamente yo no quería ese tipo de cosas pero al parecer cada vez más compañeras de mi salón se acercaban, no les hacía caso, pues siempre lo hacían cuando querían algo de mí, me había acostumbrado a que me trataran como a un simple y vulgar juguete, era su juguete, ellas me pedían una tarea, algunas usaban su "típico encanto femenino" que obviamente no funcionba en mi (estaba demasiado depresivo para pensar en eso) pero aún así simulaba dejarme encantar para no levantar sospechas... No obstante, estos últimos días se han estado acercando más mujeres a mi, al principio me aterraba un poco, pero uno se acostumbra. En sí, esto era raro pero... No sé como aun seguía triste... Tenía ganas de dejar de vivir nuevamente...
Meses después este sentimiento, estaba afectando mis notas y mi rendimiento en cualquier aspecto. Obviamente no quería dejar de ser 1er puesto del grado... Pero parecía que alguien más tomaría mi lugar. Y para colmo, tenía que fingir estar bien ante todos, inclusive a mis "mejores amig@s", odiaba que todose estén preguntando por cómo me siento, no quería que sepan la verdad... Y pues así estaba pasando todos los malditos días del año... En resumen quería que un día la tierra me tragarse de una vez por todas
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El estudiante: Mente débil y brillante
Teen FictionUn estudiante escolar, muy aplicado e inteligente, o al menos eso creen sus compañeros de estudio, no quiere que sepan la verdad que oculta tras esa sonrisa e inteligencia...